El presidente de la República, Mario Abdo Benítez mantuvo una reunión con el director general paraguayo de la Itaipú, Ernst Bergen, a fin de conversar sobre los graves daños ambientales registrados recientemente en la zona de protección del embalse de Itaipú Binacional.
Las autoridades de la Binacional días atrás denunciaron la invasión y tala de una zona boscosa en la franja de protección del embalse de Itaipú, que constituyen los últimos remanentes del Bosque Atlántico del Alto Paraná.
Bergen detalló que constataron la tala de al menos 11 hectáreas de bosques nativos en la zona de Puerto Indio, Alto Paraná, a unos 100 kilómetros aguas arriba de la central hidroeléctrica.
Comentó que la zona dañada es particularmente sensible, considerando que la franja de protección de Itaipú, constituida por una cobertura boscosa, tiene la función de reducir la erosión y el ingreso de sedimentos y contaminantes al embalse, protegiendo la materia prima para la generación de energía, que es el agua.
Asimismo, constituye un corredor biológico que une las reservas y refugios de la Binacional, permitiendo el paso de los animales y la preservación de otras formas de vida silvestre.
Ante esto, el jefe de Estado instruyó las medidas necesarias para garantizar que el “pulmón de la República no sea intoxicado por el virus de la deforestación”. Cabe mencionar que desde inicios de este año la hidroeléctrica viene reportando las primeras talas de árboles nativos en la zona y ante ello se inició una investigación fiscal con varias incursiones y en todas ellas, los presuntos invasores huyeron del sitio.
No obstante, regresaron pocos días después realizando una mayor incursión, tala y desmonte. Actualmente el sitio deforestado ha sido ocupado por personas, autodenominadas campesinos sin tierra, y la tala indiscriminada sigue avanzando, situándose a pocos metros del embalse.
ACCIONES INMEDIATAS
El Ministro del Interior, Euclides Acevedo, por su parte mencionó que ya fueron ilustrados de una manera gráfica del peligro de la soberanía forestal, de la fauna e hídrica y que se ha tomado la decisión de ‘reconquistar’ nuestros bosques deforestados e inmediatamente tomar todas las medidas que constitucionalmente están obligados a implementar.
Acevedo aseguró que están comprometidos junto a las distintas instituciones, de tal forma a garantizar que “el pulmón de la República no sea intoxicado por el virus de la deforestación, que finalmente termina afectando nuestra soberanía y sobre todo, va afectar a la principal fuerza energética que tiene la República”.
