martes, septiembre 30

Gobierno en redes / Félix Martín Giménez Barrios

De un tiempo para este, nos hemos acostumbrado a leer en las redes sociales, el
comunicado de distintos políticos y lideres mundiales. Muchos de estos escritos tienen
que ver con campañas políticas, informes sobre sus avances en su gestión del cargo o
algunas veces, aprovechan para aclarar algunas polémicas y ver como defenderse de
lo que consideran como ataques o persecución a su persona.

No solo comunican mediante escritos, muchos de ellos manejan las plataformas
audiovisuales para lanzar sus mensajes a sus seguidores como a sus detractores,
ósea a la opinión pública. El uso masivo de redes sociales por parte de altos mandos
políticos, como senadores, presidentes o primeros ministros, es un tema que no deja
indiferente a nadie, se puede afirmar que son un mecanismo útil para tener alguna
clase de contacto con la ciudadanía y compartan sus decisiones de forma instantánea.

Lideres del mundo como Donald Trump, el papa Francisco o Narendra Modi quien es
el primer ministro de la India, cuentan con millones de seguidores en las redes, pero
no solo son los políticos quienes se muestran en sus perfiles, sino que aparte, también
existen las cuentas oficiales de los estados nacionales. Pese a las ventajas que todo
esto pueda presentar como la comunicación directa, la interacción con el pueblo y la
búsqueda de transparencia, se han presentado desventajas que generan polémica.

Las redes sociales han demostrado ser útiles para la propaganda, cosa que puede ser
perjudicial a la democracia, generando desinformación. Los lideres y gobiernos
pueden también usar las redes para la manipulación de la opinión publica a su favor o
en contra de la oposición, buscando únicamente sus intereses. Por lo que se puede
decir que la presencia constante de políticos en redes puede tender al populismo a
largo plazo.

Tanto en Paraguay como en el mundo, los populistas del gobierno han logrado crear
narrativas de héroes o victimas en las redes sociales, también lograron designar como
villanos a opositores, solo con el objetivo de generar lealtad entre sus seguidores al
manipular la información a su favor. Como ciudadanos se debe de estar atentos a las
mentiras y recordar que en política, las redes solo deben servir para una comunicación
transparente y por sobre todo, responsable.