Las cajas fiscales en su conjunto están pasando por circunstancias dramáticas. La de los militares tienen un déficit superior al 60%, la de los maestros está a punto de llegar al 50%. Eso significa que aquello que se contribuye para mantener sana y fuerte en la caja no alcanza y se están utilizando recursos de otras cajas que también corren riesgos o de los impuestos generales de cada uno.
Una caja realmente sana es aquella que vive de los recursos del sector que se encuentra trabajando en ese instante y financia a lo que ya se han retirado.
Una reforma de la caja fiscal paraguaya se necesita con urgencia; así como estamos dentro de muy poco tiempo vamos a ver a manifestantes en las calles solicitando se les sea apagado el haber jubilatorio en forma total y no fraccionada. Eso ya pasó en varios países del mundo, algunos muy cercanos como el caso de la Argentina.
Claro que pareciera que mientras no nos toque no nos damos cuenta de la urgencia que requerimos para cambiar esta ecuación que generará mucho descontento y muchas lágrimas a corto plazo.