Colombia logró retener el título del fútbol sala de los Juegos Bolivarianos al igualar por 1-1 con Paraguay, que se quedó con la plata, mientras que el bronce fue para Panamá, en la edición 19ª del certamen.
El anfitrión, que terminó invicto y con 11 puntos, llevó el peso del partido, pese a que con el empate se colgaba la presea dorada. Sin embargo, en los primeros minutos por poco lo sorprende el quinteto guaraní, en una acción que resultó ser aislada porque las mejores situaciones en la primera parte fueron para los cafeteros.
Los locales hicieron figura al portero Giovanni González con una exhibición que inició con una doble atajada para darle tiempo a Alcides Giménez de empezar a pesar en el juego.
La resistencia de la rojiblanca no aguantó mucho. Un disparo de Richard Gutiérrez le permitió a los colombianos abrir el marcador para manejar mejor el partido, que su rival empezó a luchar y hasta tuvo una chance con el propio portero González cuando lo dejaron partear con libertad para buscar empatar.
La insistencia de seleccionado tricolor, impulsada por su afición, le permitió empezar a trabajar el segundo tanto.
Hubo un postazo con Harrison Santos y luego Angellott Caro probó de nuevo al guardameta rival, al que también exigió el portero local José Sánchez en otro pasaje difícil para los paraguayos, pese a intentar lastimar en una jugada de Jonatan Franco.
Antes del descanso, González se encargó de darle aire a sus compañeros con una par de atajadas para intentar recomponer el camino en el complemento con dos goles que el entregarían el oro.
Los paraguayos reiniciaron como una mejor actitud y mayor agresividad. Se hizo importante Julio Mareco y Franco estuvo muy cerca de emparejar el marcador en el mejor momento de la Albirroja.
En cada intento que no concluían los cafeteros, su rival armaba una salida muy rápida, casi siempre con Franco. Pero el 1-1 acabó por llegar en un tiro de esquina con la anotación de Diego Poggi.
Para salir del bache, Jhonatan Giraldo soltó un remate que puso peligro, pero a esa altura, ya el juego se había transformado y Paraguay usaba un jugador-arquero para sostener la pelota y dejar correr los minutos para no arriesgar la presea de plata.
“Queríamos llevarnos el oro, pero las condiciones no estaban dadas para nosotros. Teníamos jugadores muy desgastados. Estos torneos son difíciles. Nos vamos orgullosos como la plata”, expresó a Efe el capitán Mareco.
Entretanto, Caro, la figura de los colombianos, señaló a periodistas que “esta medalla va dedicada a Colombia, al fútbol sala y a nosotros también”.
“Hemos competido muy bien desde el minuto uno. Estoy feliz por consagrarnos otra vez campeones. Esto es historia para nuestro deporte. Esperamos seguir cosechando medallas para nuestro país”, afirmó.
A primera hora, Panamá hizo historia conquistando su primera medalla en unos Bolivarianos en el fútbol sala. El equipo dirigido por Apolinar Gálvez pudo culminar su memorable participación en Valledupar con una goleada 10-2 a El Salvador para asegurarse en el podio.
En el otro juego de jornada, Venezuela goleó 11-5 a República Dominicana, pero no le alcanzó para medalla. EFE