El retorno a clases presenciales genera una serie de preocupaciones, como es lógico, pero se nota que la mayoría de los casos los padres están interesados en que las clases presenciales cien al ciento por ciento.
Ya han pasado dos años bastante complicados de ayudar a los hijos en las tareas que ellos no conocían y en un método que no ha funcionado y que los mismos maestros afirman que no ha sido suficiente para dar el desarrollo completo de clases y para que los niños y jóvenes aprendieran.
Menos del 40% es el porcentaje de aprendizaje durante estos dos años de pandemia. La universidad no tiene aún definida la idea del retorno al ciento por ciento presencial, lo que también constituye un serio problema. Aquí la cuestión de la educación en su conjunto en la que tiene que ser mirada con mucha atención. Sí se supone que gran parte de los jóvenes ya fueron ocultados no tendría ninguna razón de por qué la Universidad Nacional de Asunción y otras más no anuncien que el ciento por ciento el retorno a clases ya será presencial.
En el caso de los niños la vacunación todavía marcha a paso lento y esa es una de las razones por la que existen temores en torno a la propagación que podría tener en la variante Ómicron que ha disminuido en la cantidad de personas afectadas y en el número de personas fallecidas; pero se teme que se tenga una meseta muy alta durante mucho tiempo porque todavía tenemos un millón y medio de paraguayos no vacunados.
La mirada de la educación con temas de urgencia presencial por un lado y por el otro lado aun la resistencia de una porción importante de la población paraguaya a recibir los biológicos y a salir de la franja de peligro que supone contraer el Covid-19.
