El tema del endeudamiento paraguayo va a alcanzar una nueva dimensión el próximo año US$ 1300 millones más en lo que propone el Ejecutivo, sin hacer ningún tipo de sacrificio al interior de esta estructura que en el año 1995 tenía 100 mil empleados y ahora tiene 350.000.
Esta cantidad no se compadece para nada con lo que debería ser una institución de este tipo. Conajzar que es una institución que se dedica a la regulación de los juegos de azar en el país, afirma que nada puede hacer acerca del cumplimiento de la norma porque son muy pocos y que ni vehículos siquiera tienen.
O sea, el Estado paraguayo tiene en algunos casos una cantidad excesiva de empleados y en otros sitios no tiene nada a nadie. Sería bueno que cuando se trata de estudiar un presupuesto se racionalice el uso de los recursos por un lado, se mejore notablemente la calidad del gasto, y por otro lado, se distribuya de forma apropiada el numeroso personal ocioso que tenemos en la estructura parasitaria del Estado paraguayo.
Seguir afirmando que los únicos que van a seguir pagando esta deuda son los mismos de siempre, a los que, por una cuestión de cortesía circunstancial, no le elevan los impuestos. Es simplemente ver cómo la economía paraguaya se sigue destruyendo desde la propia estructura del Estado que debería preservarla.