Hace pocos días, Juan Manuel Brunetti fue designado como nuevo ministro de Educación tras la salida de Eduardo Petta. En su primera intervención ante los medios, declaró que la familia tradicional es “mamá, papá e hijos”, lo que hizo que llovieran una serie de comentarios en las redes sociales que cuestionaban esa realidad “idílica” que mencionó el nuevo ministro de una cartera tan importante.
Según datos del registro civil de Paraguay del año 2019, 82 de cada 100 inscripciones de niñas y niños fueron realizadas por personas solteras. Ante estas cifras, Aníbal Cabrera, director ejecutivo de la Coordinadora por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia (CDIA), resaltó que primeramente hay que separar la concepción de familia ideal, que sería mamá y papá, del plano de la realidad actual del país.
“Desde las guerras sucesivas que hemos tenido en el país que solo quedaron mujeres, hay que reconocer que tradicionalmente la familia ha estado constituida por mujeres jefas del hogar, de hecho, el 37% de las jefaturas del hogar están ocupadas por mujeres solas”, aseguró.
Agregó que hay que preguntarse ¿cómo son nuestras familias?, ¿cómo fuimos criados?, nuestras abuelas, nuestras madres, han criado a muchos solas, y es importante reconocer el valor y el rol de la mujer en el cuidado de las familias del Paraguay.
“Es sumamente lamentable que en su primera intervención el Ministro de Educación hable de manera discriminatoria respecto a las madres solteras. Es Ministro de un Estado laico, un Estado que debe garantizar derechos para todas las personas, independientemente de cómo son, por lo cual, en materia de derechos humanos, este es un caso de discriminación y una falta de respeto a las personas del país”, detalló Cabrera.
LO TRADICIONAL EN EL PARAGUAY
La directora de la organización Femi Unidas Paraguay, Melanie Vega, señaló que las familias paraguayas están construidas sobre la sobrecarga de tareas del cuidado por parte de las mujeres y no existe ni una política pública que haga más llevadera la situación, que reconozca el trabajo que hay desde la reproducción hasta el cuidado.
“Este Estado está en deuda con todas las madres, las que son madres por imposición, las que no deberían ser madres, con las víctimas colaterales de los feminicidios, hijos e hijas supervivientes, abandonados a su suerte. Lo tradicional en Paraguay es la mamá asesinada, mamá abusada o papá asesino o abusador”, afirmó Vega.
Por otro lado, señaló que le quedan 30 horas al presidente de la República Mario Abdo para que destituya al nuevo Ministro de Educación o habrá una marcha de las madres solteras con sus hijos en brazos.
“Le queremos decir a Juan Manuel Brunetti que tenga la decencia y evite una movilización masiva que ya no va a ser pacífica y que dé un paso al costado si no está preparado para esa cartera de Estado. No puede ser Ministro de Educación dando esas declaraciones aunque diga que salió de contexto teniendo en cuenta que según las cifras oficiales, que maquillan la realidad porque son más altas, 2 niñas de 9 a 13 años son obligadas a parir todos los días, están pariendo hijos de sus propios progenitores, de hombres de su entorno familiar, acá lo tradicional es que las instituciones no funcionen”, aseguró.
UNA MIRADA SOCIOLÓGICA
Para el sociólogo Raúl Ricardi, las familias paraguayas sufren hoy una serie de transformaciones, la práctica social fue cambiando y la familia tradicional fue entrando más en crisis. En la actualidad, hay una especie de unión libre por un lado, y por otro, de personas que deciden vivir solos, pero aquello de papá, mamá y los hijos, si bien es un importante porcentaje de la población, no es la totalidad, ya que hay una gran complejización y una mayor diversidad.
“Cuando una sociedad es compleja admite una diversidad de estilos de vida. La sociedad paraguaya se fue complejizando y ha ido adoptando prácticas diferentes a las tradicionales. Las sociedades modernas son más amplias, abiertas y ponen énfasis en el valor del individuo y en su libertad”, concluyó el especialista