En el hoy ya no podemos hacer nada para borrar al ayer sino vivir con eso y trabajar duro para enmendar los errores que nos aseguren un mañana mejor, para nosotros y nuestro entorno y mucho más si tenemos la intención de trabajar para este sin acercar las intenciones y acciones negras del pasado que el apellido trae consigo.
Paraguay tiene a Mario Abdo Benítez cómo presidente, quien fue hijo del secretario del ex dictador paraguayo Alfredo Stroesner Mario Abdo Benítez, que no necesariamente por poseer el mismo nombre de su padre signifique que sea similar al mismo. Pero el pasado pess y explica muchas cosas como el antepasado nazi del candidato presidencial chileno Kast. Los «chistes de don Mario» eran el hazmerreír de muchos en la época de Stroesner y ese designio parece pesar sobre su descendiente.
Uno carga con su pasado aunque no lo quiera y la ley lo exime de cualquier responsabilidad. El antepasado prostibulario de Trump explica pero no justifica muchas cosas del ex presidente republicano. Abdo dice que no quiere ningún cargo público nunca más. Nosotros y él contamos los días que nos separan de su partida del poder y para tranquilizarnos ha dicho que no quiere ningún cargo público para después. Al menos por ahí… zafamos.