Foto: Cinco Días
Los temas que tienen que ver con el abuso de autoridad, el acoso sexual, han pasado a ser parte de la agenda de carácter mundial, no sólo del ámbito del espectáculo, sino también del ámbito de la política.
El gobernador de Nueva York, uno de los personajes más populares durante la pandemia e hijo de uno de los grandes políticos de ese país, ha tenido que renunciar por habérsele acusado de haber abusado de su condición de poder para acosar a varias mujeres cercanas, según la denuncia y los elementos probatorios que presentó la propia fiscalía de Nueva York.
Hemos tenido también casos reiterados en Paraguay. Lo que los políticos tienen que acusar recibo es que esto ha venido para quedarse y aquel que crea que desde una condición de poder, cualquiera sea la que tenga dentro de una estructura pública o privada, sabrá que el tema del acoso será cada vez más difícil y tendrá mayor costo para quien lo realiza.
Es un ámbito de la privacidad, de la intimidad, de los sentimientos, pero también del ejercicio del poder en el sentido más perverso y ruin de todos. Es el tiempo también de aumentar el nivel de conciencia de las mujeres que son generalmente la mayoría de los sujetos de este tipo de circunstancia.
También hay casos de hombres acosados por mujeres con poder. Lo importante es entender cuáles son los límites y dónde terminarán aquellos o aquellas que lo hagan.