Decenas de ciudades de Estados Unidos, fueron nuevamente escenario de violentos disturbios en protesta por la muerte de George Floyd, el caso más reciente de violencia policial contra afroamericanos en el país.
En el centro de Minneapolis, ha muerto una persona en un tiroteo. «Ya basta», ha dicho el jefe de la policía. El presidente de EEUU, Donald Trump, ha ofrecido desplegar el Ejército, pero de momento el gobernador Tim Walz no lo ha requerido. Otra persona ha fallecido en Indiannapolis.
Durante la jornada del sábado muchos ciudadanos salieron a limpiar los destrozos de la noche anterior. Querían demostrar que son minoría los vándalos, pero el daño es mayúsculo. Incluso hay autoridades que apuntan a grupos de fuera del estado como responsables de los disturbios.
Amnistía Internacional ha acusado a la Policía de Estados Unidos de incumplir con sus obligaciones con el derecho Internacional al aplicar una respuesta «excesiva», «militarizada» y «alimentada por el racismo y la supremacía blanca» contra las manifestaciones en todo el país por la muerte del ciudadano de raza negra George Floyd en Mineápolis este lunes durante una detención, que ha resultado en la imputación de un agente por asesinato. «La Policía estadounidense de todo el país está incumpliendo sus obligaciones de respetar y facilitar el derecho a la protesta pacífica, exacerbando una situación tensa y poniendo en peligro la vida de los manifestantes», ha lamentado la directora nacional de investigación de la ONG para EEUU, Rachel Ward, según recoge Europa Press.