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De terapias y novedades

Este año serán 13 años del accidente cuasi mortal que sufrí y me llevó a ser intervenido en varias ocasiones y pasar por varias terapias, desde fisioterapia, fonoaudiología, hidroterapia, equinoterapia, terapia ocupacional y ahora soy testigo de la fagoterapia, también conocida como terapia de luz, es un tratamiento que utiliza luz ultravioleta (UV) para tratar diversas afecciones de la piel.

En el campo de los avances médicos, un grupo de médicos y profesionales de la salud abogan por la creación de una estructura pública dedicada al estudio y a la producción de virus bacteriófagos, es una alternativa a los antibióticos. No tiene nada que ver con el verbo fagocitar o alimentarse, que puede ser o no una terapia para el que come mal o no se alimenta y ue puede presentar una serie de problemas cómo;

  • Enfermedad hepática crónica.
  • Insuficiencia renal crónica.
  • Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC)
  • Demencia.
  • Insuficiencia cardíaca.
  • Hepatitis.
  • VIH.
  • Tiroides hipoactiva (hipotiroidismo)

Todo eso  no significa hacer del comer un ejercicio frecuente que reemplace a otros ejercicios que pueden traer beneficios importantes y acompañar la terapia que esté tomando para enfrentar un dilema con su salud. 

Formas nuevas de terapias

Esta terapia  consiste en la utilización de bacteriófagos o fagos para tratar infecciones por bacterias, principalmente en seres humanos, aunque también se puede utilizar en animales y en plantas. para enfrentar el trabajo de algunas bacterias que en silencio y muy discretamente pueden afectar a quién no tome en serio las precauciones de mamá; “cuidate siempre”.

 Los fagos son virus que tienen dos ciclos vitales: lítico y lisogénico. En el ciclo lítico, el fago infecta una bacteria, la utiliza para multiplicarse y luego la mata al hacerla explotar, o «lisar», para liberar nuevas partículas víricas.

Este viaje de la recuperación o de volver a vivir después de casi dejar de existir me ha llevado a hacer muchas preguntas a mis terapeutas, que quizá se recuerden de mí por ser el paciente más cuestionador, pero el que ha respondido siempre  a lo que se me ha solicitado hacer. Con dificultades, porque no es fácil existir con las rodillas y la cabeza golpeada por más de 10 años. 

Siempre me despertó curiosidad el saber qué fines tienen las terapias que existen para tratar o mejorar algún problema que presentemos. Si es cómo yo ya sabe que existe la fagoterapia y para que sirve si está dispuesto en experimentar alternativas que existen sin depender de antibióticos. Es cuestión de probar.

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