Vivimos más de 3 décadas de democracia y han existido muchos cambios en este tiempo, uno de los más destacados tiene que ver con el SMO (Servicio Militar Obligatorio) o CIMEFOR (Centro de Instrucción Militar para Estudiantes y Formación de Oficiales de Reserva). El mismo está en crisis porque ha dejado de ser una actividad que estimule cumplir a la juventud paraguaya para ingresar a la “formación militar” y tener oficiales de reserva en caso de que se presenten conflictos bélicos que precisen de personas entrenadas para poder hacer frente al enemigo que se presente. Claro, hoy día ya no se trata de personas armadas o con herramientas de destrucción porque las guerras son conflictos de conocimientos.
Los enemigos usan drones o máquinas dirigidas por seres humanos en bases seguras donde ven lo que pasa a través de pantallas, imágenes que son retransmitidas por medios de comunicación sensacionalistas que logran vender o hacerse de publicidad a través de macabras fotos o videos de cómo una bomba acaba con lugares cargados con lo más importante del mundo, que son vidas humanas.
Volviendo al título del escrito, hoy me tocó ver una foto de una compañía del ejército paraguayo con 2 pelotones, una imagen que no emula al pasado cuando era tradicional ver la formación de muchos jóvenes con su uniforme de faena o gala firmes y haciendo el orden cerrado o participar de la retreta o el toque militar que indica que una tropa debe retirarse o regresar al cuartel.
Cada vez tenemos menos jóvenes interesados en el servicio militar obligatorio y menos en actividades civiles alternativas que nunca se reglamentaron. Antes el cuartel era donde se preparaba al integrante del cuerpo militar para hacer frente a las demandas físicas o psicológicas de una batalla que dada las características de la cantidad de soldados y la “vieja escuela” de pelear tenemos pocas o nula capacidad de aguantar o hacer frente cualquier ataque lleguemos a sufrir
Cambiar el modelo
Un entendido de las leyes me dijo que una opción de reglamentar el servicio civil que debe existir en nuestra constitución que continúa exponiendo la obligatoriedad que en su Art. 129 dice que: “todo paraguayo tiene la obligación de prepararse y prestar su concurso para la defensa armada de la Patria”. Sin embargo es un servicio que ha perdido hasta su encanto de ser el “cool” en los círculos de amigos o conocidos que admiren lo que “podrían llegar a aprender” en los lugares.
En estos lugares la instrucción está a cargo de militares recién recibidos de la ACADEMIL (academia militar) o cualquier militar que haya tenido una formación oficial militar. Todo esto podría ser reemplazado por un servicio de índole civil cómo el cuidado a personas de tercera edad, actividades voluntarias, limpieza y orden de espacios públicos o lo que necesite del toque humano para que se desarrolle bien. Todo eso se justifica con la presencia y uso de la vitalidad joven para tener en orden y condiciones adecuadas la vida de personas y/o espacios públicos que pueden servir no solo a los que presten el servicio sino a todo ciudadano paraguayo.
De esta forma creo que el servicio militar obligatorio podría ser sustituido por uno civil en tiempos de paz, integración y globalización, tendría más sentido y quizá tendría la misma popularidad que hace más de 30 años.
