¿Alguna vez te pasó que sentiste que tenías que dejar a una persona, un trabajo, una sociedad?
Si fue así, seguro sabrás que no son decisiones fáciles de tomar.
¿Cómo saber si es una decisión correcta, o si es el tiempo correcto?
La mejor manera de saber que estamos haciendo lo correcto es autoanalizándonos, haciéndonos a nosotros mismos preguntas como estas: 1. En esta relación (trabajo, o sociedad), ¿ya no me siento realmente a gusto? ¿O simplemente estoy siendo caprichoso/a o necio/a?
2. ¿Será que dí el 100% de lo mejor que podía dar de mí? o ¿no estoy segura de haberlo dado todo? ¿Hay algo en lo que –sinceramente- puedo mejorar?
3. ¿A qué le tengo miedo al pensar en salir de la situación? ¿Confío realmente en mi mismo/a y mis capacidades?
La confianza en uno mismo es clave para cualquier decisión que uno tome, es más, ni siquiera hace falta estar en situaciones tan extremas como realizar cambios en determinadas situaciones. Día a día, a cada paso que damos, es necesario y muy ventajoso, actuar con confianza. La confianza proviene del autoconocimiento, del saber qué cosas hago bien, qué cosas no tanto. Qué me gusta y qué no, cuáles son mis cualidades de carácter, etc. También crece cuando enfrentamos situaciones que requieren valentía. Se alimenta con la disciplina y la autosugestión y se engrandece cuando logramos lo que nos proponemos.
Para llegar a eso, está en nuestras manos decidir dar cada día y en cada situación, lo mejor de nosotros mismos, sabiendo que, aunque no podamos cambiar las circunstancias, siempre podremos controlar y determinar qué actitud tendremos ante ellas. Esta es la última de nuestras libertades, en esto yace nuestro libre albedrío.
Decidir tener una buena actitud ante circunstancias que no podemos controlar y dar siempre lo mejor de nosotros mismos, fortalecerá tanto nuestra confianza que, cuando tengamos que tomar decisiones drásticas, no tendremos la menor duda de que estamos haciendo lo correcto. Los resultados serán buenos y -aunque se disfracen de fracaso- vamos a ver la oportunidad escondida detrás de ello y siempre saldremos victoriosos.
