Asunción, 29 jun (EFE).- Un tribunal condenó este martes a 34 años de cárcel a Oscar Benítez, acusado del secuestro y asesinato en 2005 de Cecilia Cubas, hija del expresidente Raúl Cubas (1998-1999), un crimen atribuido a un grupo de izquierda que se considera el origen de la guerrilla Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
Benítez, extraditado en 2019 de Brasil, donde se encontraba huido, se había declarado culpable y pedido perdón a la familia de la víctima, que tenía 31 años cuando fue secuestrada en septiembre de 2004 cerca de su residencia en San Lorenzo, un municipio cercano a Asunción.
La Fiscalía informó que Benítez recibió una pena de 24 años de prisión y otros diez como medidas de seguridad tras los alegatos finales del juicio, comenzado en enero, bajo la acusación de secuestro y homicidio doloso.
“Los elementos probatorios arrimados por el Ministerio Público durante el debate público son contundentes”, señaló el tribunal de sentencia, según el comunicado de la Fiscalía, que había solicitado la pena finalmente dictada.
La Fiscalía sostuvo que Benítez era el “jefe operativo y contacto” del grupo que realizó el secuestro, estando presente en el mismo.
Asimismo, la Fiscalía mantuvo que el acusado alquiló una casa en los alrededores de donde residía Cubas para hacer un seguimiento de sus movimientos.
Benítez fue arrestado en Brasil en 2017, tras 12 años prófugo.
El fiscal del caso lo consideró entonces como un “eslabón” del grupo político que en 2008 creó el EPP, guerrilla activa en el norte del país suramericano y dedicada al secuestro de empresarios bajo postulados marxistas y de defensa del campesinado.
Cecilia Cubas era la mayor de las dos hijas Raúl Cubas y de Mirta Gusinky, hasta hace unos meses senadora, también por el Partido Colorado.
Su cadáver fue hallado cinco meses después del secuestro en una fosa cavada en una vivienda de Ñemby (Gran Asunción) y después de que su familia pagara 300.000 dólares por su liberación. EFE