Mientras en Paraguay y en otras partes del mundo se celebraba el día del padre específicamente en el vecindario sudamericano y latino se festejaba una fecha cívicamente importante por lo que significa el cambio de presidente y gobierno en un país. Colombia viró a la izquierda el domingo pasado.
Gustavo Petro es el nuevo presidente de ese país, reemplazando a Ivan Duque Marquez, un centro demócrata que ahora abre las puertas de la casa de Nariño al izquierdista Petro ex alcalde de Bogotá, senador de la Nación y con con su pasado de haber formado parte del grupo guerrillero M-19.
Desde su labor como senador de su país ahora se lanzó y ganó la presidencia de Colombia frente a su contrincante de derecha Rodolfo Hernández por la diferencia de un poco más de 3 % de votos porcentuales , dejando la clara la evidencia de tener personas que levantan la bandera de la izquierda en Colombia por primera vez en su historia buscando responder a una lista de inconvenientes que molestan al ciudadano común colombiano. Un país lleno de desigualdades y violencia tendrá a Petro por cuatro años sin reelección buscando mejorar las condiciones de una Nación muy golpeada.
Cómo la pobreza, el desempleo, la discriminación, la adicción a las drogas o la desigualdad de clases Clombia tiene una serie de pendientes que exceden el mandato de 4 años de Petro. En un país que lleva décadas gobernado por una clase política tradicional y conservadora y con más de once millones de votos Petro es ahora el primer presidente de izquierda en Colombia que tiene una agenda de izquierda El país estrena también a una vicepresidenta afrocolombiana, Francia Márquez.
Una agenda demandante
Petro propone llevar a Colombia, un país azotado por la violencia y uno de los más desiguales del mundo hacia la paz y la equidad a través de profundas reformas políticas económicas y sociales, siendo la más importante la reforma agraria. Más de la mitad de las tierras en Colombia está en manos del 1,5 % de la población y hay quienes piensan que esto junto al abandono del estado al campo fue caldo de cultivo para el surgimiento de las guerrillas, luego del narcotráfico.
Por otro lado se encuentran la salud, los problemas en la burocracia, sus costos y la corrupción hay una gran tarea que le toca acometer a Petro quien busca una mayor intervención estatal en estos temas y busca una mayor intervención estatal con impuestos progresivos a los ricos para mejorar la atención sanitaria.
Entre otras propuestas se encuentra el ambientalismo, dejando atrás la economía extractivista del petróleo y potenciar la producción de energía limpia haciendo cambiar la postura del ciudadano que ve al estado cómo un mal gerente del fondo nacional.
Ahora el economista especializado en medio ambiente y ex intendente de Bogotá asume la presidencia cómo primer presidente de izquierda en Colombia y veremos cuando avanza la agenda tan atractiva en campaña pero tan difícil de llevarla adelante