La deforestación o la extinción de las plantas forestales de un terreno es un problema severo que lo conocemos los paraguayos con las 8 millones de hectáreas que son deforestadas anualmente. Eliminar esta acción forma parte de muchas “agendas políticas”, programas de trabajo expuestos en campañas políticas para asegurarse votos y sobre todo evitar dañar los ecosistemas, y a una pérdida de biodiversidad y a la aridez en el terreno pero se avanzó poco. Una de sus consecuencias es que evita la fijación de dióxido de carbono (CO2), por lo que se contribuye al cambio climático.
Los daños que pueden causar al medio ambiente y la vida que allí existe son devastadores al quedar deforestados como se ejemplifica en la región amazónica ahora.
En Colombia han identificado la causa número uno en el porqué se ha dado tanta deforestación en este país, la conclusión no fue que la ganadería o el crear espacio para vacas, caballos o animales domésticos para el consumo humano sino para tener suficiente espacio para el cultivo de coca, ingrediente base de la cocaína. Aunque los ranchos ganaderos talaron más de 3 millones de hectáreas de selva amazónica en 2018, el impacto de la coca fue insignificante. Solo 45.000 hectáreas fueron taladas para cultivo de coca en 2018.
Hechos cómo esto hace que ahora corran historias en la red bajo el título de; “La ganadería, no la coca, impulsa la deforestación de la Amazonía en Colombia se informa”.
La huella de carbono por kilogramo de cocaína fabricada es significativamente mayor que la de otros cultivos agrícolas lícitos, como el café, el cacao en grano y la caña de azúcar (por ejemplo, 30 veces mayor que la del cacao en grano y 2.600 veces mayor que la de la caña de azúcar.
Cada vez más terreno
Según investigaciones y estudios hechos en este campo de una hectárea se puede extraer 1.125 kilos de hoja seca que luego es usada para producir el estupefaciente que no solo puede dañar la salud humana sino también de nuestro ecosistema. Que no está tan feliz cómo el cuerpo de una persona habituada al consumo del polvo blanco y que hace que tengamos aumento de temperatura, disminución del apetito, estado de alerta y falsa sensación de agudeza mental además de aumento de la presión arterial y el ritmo cardiaco.
Ya conociendo el comportamiento del clima, podemos concluir que no está feliz y sano por carecer de poder darnos sensaciones templadas por la variable e intensa presencia de precipitaciones, calor y frío y además son culpables de otros problemas que se suman a lo que significa el ir quedándonos sin flora en el mundo.
Nuestro hogar no puede continuar bien cómodo si no cuidamos nuestros espacios y sin asumnir la culpa de destruir nuestra casa. La demanda de drogas con la producción en terrenos deforestados constituye una arista de un problema que cada vez nos pasa mas la factura a los seres humanos y en especial a los latinoamericanos.