Recientemente se ha descubierto un cementerio con fetos enterrados que habían sido sometidos a un aborto. En las tumbas, se encuentra expuesto el nombre de la progenitora sin su consentimiento y pese a que ninguna de ellas está enterrada allí. Los entierros se alinean en el sector 108 del cementerio ubicado en Roma.
Este descubrimiento provocó una oleada de indignación y denuncias por parte de las asociaciones de defensa de los derechos de las mujeres.