jueves, noviembre 21, 2024
24 C
Asunción

Cataluña bajo violencia callejera

Recientemente hubo elecciones en Cataluña por la Generalitat (gobierno regional), aunque no ganó la coalición oficialista PSOE-Podemos, si lo hizo el izquierdismo y los independentistas con lo cual en el fondo se mantuvo el status quo de la Comunidad Autonómica, más allá de la irrupción de Vox en detrimento del PP y Ciudadanos.

Pero, la frágil paz española se quebró nuevamente, luego que un tribunal ordenara el arresto de rapero Pablo Rivadulla Duro (Pablo Hasél), quien en cuyas canciones con absurdas letras en franca distorsión con la realidad histórica y total propaganda comunista, sus versos violentos y anti-sistema propugnaban el asesinato masivo de Los Borbones, la familia real española al mejor estilo de la Francia revolucionaria de Luís XVI. Hasél condenado por la Audiencia Nacional por enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona, no se presentó ante ésta y se atrincheró en la Universidad de Lleida, lo que obligó a su arresto

Más allá del obvio anacronismo e incomparable comparación entre la monarquía francesa de finales del siglo XVIII y la actual monarquía española, el debate se centra justamente en los límites a la libertad de expresión, lo que equivale a preguntarnos ¿en aras de la libertad de expresión es aceptable y legal incitar al odio y al asesinato? La respuesta racional, cívica y legal es un contundente no.

Sin embargo, infelizmente así no lo entienden miles de españoles de diversas edades, estratos sociales e ideológicamente muy vinculados a la izquierda y más concretamente a la izquierda radical por tanto anarquista y violenta, coligada simplemente con vándalos y un pequeño grupo de inmaduros que han salido a las calles bien para “romper el aburrimiento” y otros delincuentes que han terminado destruyendo bienes públicos agrediendo a la Policía y como típico formato black matter live, para saquear y robar, sobre todo tiendas deportivas o de ropas lujosas para terminas más tarde rematándolas por internet.

Justamente eso es lo que ha ocurrido la semana pasada en Cataluña y concretamente en la ciudad de Barcelona, donde nuevamente grupos de la izquierda radical se volcaron a las calles tras una convocatoria por las redes sociales para una manifestación pacífica, que luego de un par de horas, se tornaron violentas y en vandálicas una y otra vez.

La tormenta de las calles catalanas subió a los altos niveles de la política de Madrid, Unidas Podemos del comunista Pablo Iglesias ha anunciado que solicitará el indulto del rapero, a la vez, Pablo Echenique el exsecretario de organización de Podemos lanzó un tweet incendiario o al menos muy controversial y que según Vox sostienen alentó los vándalos y finalmente le PSOE condenó categóricamente la violencia.

Nahem Reyes
Nahem Reyes
Doctor en Historia de la Universidad Católica Andrés Bello e investigador asociado del Centro de Estudios de América de la Universidad Central de Venezuela

Más del autor

Crisis en las relaciones

Un bromance con limitaciones

México se prueba a fondo

Vuelan sucursal de Bancop en Naranjal