Con una curva de descenso dentro de los casos de contagio, se podría considerar que el contexto sanitario del país se encuentra atravesando una buena racha, pasando del 60% de positividad a casi un 25%. Sin embargo, para hablar de una disminución en cifras de fallecidos e internados, aún se deben esperar más semanas.
Desde el ministerio de Salud indicaron que para la última semana del mes de enero se registró un descenso en la cantidad de casos por Covid-19. Sin embargo, para considerarse una desaceleración, la mencionada disminución debería seguir desarrollándose durante tres semanas consecutivas.
Al respecto, el Dr. en infectología, Tomás Mateo Balmelli, recordó que estos son los efectos esperables de la variante Ómicron, la cual cuenta con características especiales como 6 semanas de duración del brote, para posteriormente registrarse un rápido descenso.
“Luego de haber llegado a un 60% en el pico de contagios registrados a mediados de enero, hoy observamos entre un 25 y 27% de positivos, siendo esto un dato sucesivo”, informó el Dr. Balmelli.
Dr. Tomás Mateo Balmelli
Para el infectólogo estos indicadores epidemiológicos que van hacia el descenso tienen explicaciones, principalmente relacionadas al comportamiento natural de la nueva variante. No obstante, resaltó que dentro de la disminución de la transmisión, las vacunas no tienen ninguna relación, pues las mismas solo se centran en evitar las formas graves de la enfermedad, no así en adquirir o no el virus.
Es por eso que el número de fallecidos y la cantidad de hospitalizaciones aún no registra un descenso, como en el caso de la transmisión comunitaria, pues los dos factores mencionados se encuentran relacionados con el tiempo de internación atravesado por el enfermo.
“Generalmente los hospitalizados se hallan en dicha situación hace más de una semana. Entonces, el descenso significativo en el número de hospitalizados y fallecidos se observaría recién en 3 semanas, aproximadamente”, declaró el Dr. Balmelli, recordando que en terapia intensiva se sigue manteniendo la cifra de la muerte de una persona por cada 3 internados.
INFORMACIONES POSITIVAS
Según el profesional, hoy se puede contar con un mejor estado en el manejo del virus que al inicio de la pandemia, teniendo en cuenta las nuevas terapéuticas y otros tratamientos para la evolución del Covid-19. Aún así, la enfermedad sigue cobrando vidas, con un mayor enfoque en pacientes vulnerables por su exposición a todo tipo de infecciones.
“De todos modos, las informaciones referentes a la disminución del nivel de contagio deben tomarse como una mejoría importante desde el punto de vista epidemiológico, pues la transmisión está bajando”, comentó el Dr. Balmelli.
Ahora bien, el médico también resaltó que los próximos aspectos a llevarse a cabo en el ámbito de la salud deberían relacionarse con el fortalecimiento de los sistemas sanitarios, lo cual se enlaza de manera directa con la atención precoz de un paciente que cuenta con una infección de vía respiratoria.
“Aparte del diagnóstico temprano, también debe aplicarse un tratamiento anticipado y así también, quienes requieran de internación deberían contar con camas, trabajadores sanitarios disponibles, laboratorios a su disposición, así como imágenes y medicamentos para una recuperación rápida y óptima”, aseveró el Dr. Balmelli.
Con esto, el médico apunta a una acelerada circulación hospitalaria, sin estresar el sistema sanitario. Entonces, las orientaciones con respecto a la situación epidemiológica actual deben centrarse en luchar contra el Covid-19, esencialmente en los hospitales, pues estos deben encontrarse ampliamente preparados, con los necesarios mejoramientos para cada paciente ante sus necesidades diagnósticas y terapéuticas.
“Por otra parte, también debe analizarse un seguimiento de cada caso para que podamos detectar en aquellos con comorbilidad lo que se complica o no, para ingresarlos en los hospitales, con los medicamentos necesarios con el fin de evitar una mayor infección por parte de los pacientes”, determinó el infectólogo.
De este modo, también se contaría con un egreso más rápido y posible de los hospitales por parte de cada internado, vislumbrando de esta manera la posibilidad de una circulación más dinámica entre las personas, dejando de lado las saturaciones anteriormente padecidas.
“Ya pasamos la etapa de la prevención y las medidas sanitarias, por lo cual ahora debemos apuntar de manera más directa al fortalecimiento de los sistemas sanitarios, pues estos deberían potenciarse para dar respuestas en los hospitales”, concluyó el Dr. Balmelli.
