Rossana Mazó es licenciada en diseño de moda, asesora de imagen, posee experiencia en visual merchandising, vidrieras y decoraciones. También es co-fundadora de una marca ready to wear (listo para llevar), en proceso, llamada Klou.
La experta afirmó que esta primavera trae a la moda muchos colores, tanto pasteles como saturados: el verde malva, lavanda, amarillo y anaranjado. “A pesar que las temporadas imponen a veces colores de estación, soy partidaria que, si no va con tu colorimetría, no debes forzar a usarla, no debemos dejarnos llevar por las tendencias, sino por lo que nos favorece y realza”, aseguró.
Mencionó que una tendencia muy versátil son los sets monocromáticos. Como, por ejemplo, los blazers con el pantalón o short del mismo color o tops con faldas de igual tejido. “Podemos usar tanto el set completo como por separado, teniendo así más formas de aprovechar las prendas”, indicó.
Consideró que en Paraguay las personas continúan dejándose influenciar por los países vecinos. “Nos dejamos llevar mucho por las tendencias marcadas y una vez que pasa esa época, las prendas ya no se usan. Considero que cada persona debe tener su propio estilo y no imponerse modas, adaptar esas tendencias a lo que a uno le identifica”, manifestó.
Desde su punto de vista, señaló que la mujer paraguaya tiene dos estilos: uno más clásico que no se arriesga y va por lo más minimalista, el otro estilo que es más arriesgado, con estampados, diseños sensuales y mucha influencia de las tendencias.
“Con eso no estoy diciendo que esos estilos están mal, considero que debemos conocernos más, animarnos a nuevos diseños y saber lo que nos favorece, dependiendo de nuestra silueta, cuestiones que la asesoría de imagen nos ayuda a entender”, aseveró.
Declaró que en la actualidad hay muchas marcas que están meditando tener su propio estilo con base en las tendencias. “Me parece lo ideal porque hay que innovar siempre. Cada vez más se piensa en los distintos tipos de cuerpo para poder satisfacer a mercados más amplios. Sin embargo, aún considero que las marcas pueden dar mucho más y pensar más en la comodidad y versatilidad, antes que en las tendencias y la venta en masa”, reflexionó.
Sostuvo que falta más empatía por parte de las marcas, pensar en las distintas actividades que podría tener el cliente, en cómo resolver las necesidades de su día a día y brindarle seguridad. No dejarse llevar tanto por el lujo o las ideas de un mundo surreal, sino ponerse en el lugar de los demás, brindando siempre calidad y mano de obra ética.
Aconsejó no dejarse llevar por las tendencias, ser fiel al estilo de uno mismo y buscar siempre prendas versátiles, que sirvan tanto para ir al trabajo, como para salir por la noche. “A la hora de comprar ropa es muy importante pensar en qué distintas ocasiones podrías usar esa prenda para aprovecharla, no comprar por impulso o por un precio atractivo”, aconsejó la profesional.
SU FASCINACIÓN POR LA MODA
La pasión por la moda de Rossana nació de una forma diferente a las demás. No fue de las diseñadoras que desde chica coció las prendas para sus muñecas, sino que fue conociéndose a sí misma a lo largo de su vida. “Fue en mi adolescencia que sentí interés por la moda. Me causaba mucha curiosidad saber cómo se hacía lo que me ponía y todo el proceso que conllevaba. Siempre me gustaron las manualidades y el arte, es por ello que me gusta explorar los distintos campos de la moda, ya sea el diseño, la asesoría de imagen o el visual merchandising que va ligado a mi otro interés: el diseño de interiores y la decoración”, afirmó.
Expresó que fue un interés que desarrolló a medida que crecía, “tendrá que ver con que mis abuelas eran modistas o que mi mamá acompañó mi crecimiento detectando mis aptitudes hacia el arte y alentándome a que siga lo que me gusta. Es importante estar rodeado de personas que crean en tu capacidad, mi familia, mis amigos y primeros clientes siempre me han entusiasmado”.
Mazó comenzó desde su época escolar aprendiendo sobre moldería, luego, durante su carrera universitaria emprendió en ferias con prendas que compraba por internet y ella misma seleccionaba. Igualmente, participó en eventos de desfiles con diseñadores reconocidos a través de un trabajo en una florería, y así fue haciéndose de contactos. “Hoy en día aún me falta mucho por conocer y experimentar, pero siento que voy en la dirección correcta hacia lo que quiero lograr, nunca es tarde para ello”, contó
Comentó que su sueño es poder brindar siempre soluciones con todo lo que realice, ya sea con sus diseños de indumentaria a medida, ready to wear o con la asesoría de imagen integral, alcanzar el éxito de sus emprendimientos a través de esos objetivos.
Finalizó afirmando que su profesión le enseñó a ser más empática, a pensar en los demás y en qué puede hacer desde su lugar, desde sus actividades diarias desempeñando su labor. “Aprendí que realmente uno puede dedicarse a lo que más le gusta hacer, todo es cuestión de creer y tener mucha perseverancia”, concluyó.