El caso de Lambaré, de tan horrible por ser un indefenso ante varios mayores que él (como en todo casos de abuso), sino además por el manejo que se dio a nivel de las autoridades de la institución, y por el valor de la madre que habló, despertó una movilización inédita entre padres, ciudadanía, prensa, etc, y esto despertó la valentía para que otros casos salgan a luz, y se exija que las victimas puedan ser reparadas y se haga justicia o sus casos sean atendidos. Este caso y todos los demás que están siendo conocidos demuestran que no se puede seguir tratando a los fenómenos sociales de delincuencia, abusos y maltratos a la infancia, a nuestra adolescencia con las mismas metodologías de siempre por no decir de 20 o 15 años atrás, porque el mundo cambió y nuestra sociedad también. El gran ausente en la psiquis de las masas en las redes fue una institución la familia, el entorno social de la crianza tanto de victimas como de agresores.
La psique del niño se forma en su primera infancia de 0 a 3, a 5 años, y que la formación social se toma del ambiente o entorno familiar. La intención es aportar algunos elementos de investigaciones a niños y jóvenes infractores, que no he leído en la inmensa cantidad de posteos y entrevistas, opiniones, etc. Las conclusiones principales de los estudios refieren que la educación sexual dirigida hacia lo biológico, el acceso a la pornografía (88,2%), las historias de violencia de los adolescentes en sus hogares, la falta de contención en el hogar y las distorsiones de la sexualidad y masculinidad, figuran como elementos relevantes para la predicción y prevención de los delitos sexuales en jóvenes.
Sobre factores de riesgo asociados a ofensa sexual, según investigadores: como factor más relevante tenemos que el 88.2% de los agresores sexuales juveniles ha tenido acceso a la pornografía, en las familias de los ofensores sexuales juveniles hay carencias de educación sexual, padres con síntomas neuróticos y dificultades importantes de pareja, el 47.1% de los jóvenes cuenta con historia de trastornos de conducta tales como robo, fugas del hogar o del centro educativo y/o agresividad impulsividad. ¿Qué investigaciones sobre niños y adolescentes agresores sexuales tenemos en Paraguay?, ¿se consideran esos datos y resultados para la el diseño de las políticas de prevención de estos delitos?