domingo, noviembre 17, 2024
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A bocanadas

Algunos tienen afortunadamente la posibilidad de pensar o reclamar el elemento de vida más importante del ser humano; oxígeno mientras que otros van a la triste y desagradable lista de fallecidos por su carencia y que según estudios de la Universidad de Washington es probable que pueda triplicarse para mediados de este año. Eso sería en el escenario más trágico: 13.148 personas para finales de junio y cómo bien lo dijo el sobreviviente del covid el Dr. Humberto Fanego de la zona del Alto Paraná “no importa cuán grande sea el número de muertos ya que con la muerte de una persona es suficiente para preocuparnos y lamentarnos”. Todo eso no parece existir en la cabeza de los últimos gerentes de salud en gestionar insumos, medicamentos u oxígenos.

NO PODEMOS RESPIRAR
Tras un largo confinamiento nos damos cuenta que nuestros administradores de salud no saben nada de gestión. El Ministro de salud Borba afirmó que “no podemos sancionar a las empresas proveedoras de oxígeno por mal servicio porque nos puede ir peor”. Esta capitulación es una muestra de cómo administran las necesidades de la gente. Lo que no dijo es que si se investigara a fondo esos contratos muchos de ellos estarían envueltos en la corrupción que nos mata todos los días. Gente común cómo usted y yo y soldados de blanco que pelean en la primera línea de esta guerra, el registro de estos soldados suma a 48 internados y 38 muertos según las tétricas estadísticas. No nos quedamos en los números volviendo al equipo más importante para continuar vidas humanas, el oxígeno que hace 4 meses es reclamado por personal de blanco mientras sube el número de personas internadas que deben luchar por hacer la primera acción más importante para continuar en el planeta que es respirar o introducir oxígeno al fundamental balón natural que es atacado por el virus; el pulmón.

La empresa que construyó la planta de oxígeno en Itauguá donde está el principal hospital público cuestionó en un aviso pago que la Dra. Yolanda González “no prendiò nunca la planta para que funcionara y que ella debe ser procesada por su incapacidad”. La dirección de contrataciones afirma que no se le debe dar el servicio de mantenimiento si se prueba que dicha empresa Chaco¨i -de los amigos del poder- no hizo bien la tarea. Mientras esto se discute no hay oxígeno y la gente muere.

La falta de gestión y la corrupción nos mata todos los días. Las discusiones estériles no sirven ahora porque la gente internada no tiene oxígeno para respirar. Nadie será condenado y esto es todavía más grave. La corrupción nos corta el oxígeno real.

Necesitamos respirar para vivir y de eso nos privan los administradores corruptos que no compraron ni contrataron a tiempo los bienes y servicios. Hay un solo culpable: el gobierno que nos tiene sobreviviendo a bocanadas.

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