Mientras los sentidos existan y funcionen bien, no hay límite de lo que puedan hacer ni tampoco necesidad de discriminar capacidades por ser parte de un grupo diferente al habitual encargado de la acción. A veces por el ver y escuchar repetidas veces que alguien hace algo, nos enfrascamos en la idea de que este sujeto es el responsable de producir en un campo determinado.
La mujer es un género creativo, fuerte e inteligente capaz de hacer muchas cosas si no igual ni mejor que el hombre, si claramente darle un sabor especial a las responsabilidades demandadas. Una de ellas es la fotografía, que es la técnica de obtención de imágenes por la acción química de la luz sobre una superficie con unas características determinadas.
Se considera a Anna Atkins cómo la primera fotógrafa mujer que había tomado sucámara en 1943 para lograr demostrar capacidad y captura de lo que nuestros ojos ven.
Fue en 1824 cuando el francés Nicephore Niepce inventó el procedimiento para lograr fotografiar, o hacer una gráfica para registrar un acontecimiento, lugar o persona y que esto sirva no solo para visualizarlo por la red o compartirlo con compañeros de trabajo, estudio, amigos o familiares.
Círculos cerrados y siempre atentos y expectantes de novedades de la imagen de uno o de lo que esté haciendo. Sentidos cuyas percepciones pueden ser aceptables para una auténtica crítica que ayude a mejorar o cambiar de objetivo o estilo de captura.
Un verbo que se hace verdad en distintas esferas desde la existencia del dispositivo abierto al mundo. Uno de ellos es el fotoperiodismo que es el arte o la práctica de comunicar noticias mediante fotografías, especialmente en revistas. Y que a su vez resume o ahorra las palabras para comunicar algo en particular. La mujer ha demostrado una notable sensibilidad en ese campo como la italiana Tina Modotti cuyos retratos hasta ahora sin referenciales.
Se hace fácil encontrar a las mejores fotógrafas del mundo en la red o ver sus trabajos en cualquier pantalla que esté conectada a la red global. Un lugar donde ocurren muchas cosas o que presenta varios escenarios, espacios y rostros que son capaces de informar y hacer común un mensaje para todos, de acuerdo a lo que sea el interés de este todo.
Sin lugar a dudas en la agenda de intereses a cubrir se encuentran mucho más allá que rostros, cuerpos atractivos, o algún deporte o evento que asegure presencia o atención masiva.
En este espacio habrán notado tres elementos que bien conjugados dan cómo resultado una imagen muy atractiva y son; mujer, fotoperiodismo y realidad. Una que está abierta para el mundo que no debe de hacerse de una cámara fotográfica para lograr buenas fotos. La realidad espera siempre al o la valiente fotógrafo/a que alcance el tiempo, lugar y personajes adecuados para lograr hacer suficientes imágenes que logren reemplazar el uso de palabras. Cómo es el caso de Daniela Rivera Antara y la historia de la migración latina en la piel de la mujer y lo que esta experimenta en el duro viaje de tener que hacerlo ella y su hijo. Como ella abundan los ejemplos de sensibilidad femenina en el arte de la fotografía para denunciar y crear empatías sobre la realidad que se describe.
