Hay nuevas formas de adicción que nos deben preocupar a todos y los videojuegos es una de ellas.
La palabra adicto viene del latín addictus (muy favorable o inclinado a, dedicado o entregado a, adjudicado legalmente a). Addictus es el participio de perfecto del verbo addicere, que en origen significó decir a favor de otro, de donde ser favorable a algo.
La adicción se considera una enfermedad crónica que ocurre tras el consumo continuado de una droga durante un período de tiempo relativamente largo. Por tanto, el principal factor desencadenante de la enfermedad es el consumo mismo de la droga.
El alcohol, tabaco, juegos de azar, la comida u otra actividad nociva para la salud particular o colectiva comparten espacio o actividad diaria con más personas que uno mismo, lo que implica integrarse y para eso dejar de lado lo que uno habitúa hacer solo e iniciar un diálogo con la familia o amigos, que son personas que pueden tener problemas que solo en una charla humana, abierta, tolerante, comprensiva y racional será posible encontrar una solución a esas dificultades. Lo que antes solo afectaba las vidas de adultos y ahora las nuevas víctimas son niños y jóvenes y sus cigarrillos, bebidas o estupefacientes que son ingeridos por sus ojos, que se entretienen no con revistas, fotos, historietas o libros sino con los videojuegos donde se promueve la violencia y la confrontación.
Nuevas amenazas
Hoy día los videojuegos que antes debían ser controlados por los padres o encargados que hoy día para encontrar una forma de deshacerse de su rol en su hogar deciden permitir el acceso y tiempo de los niños o jóvenes a sus videojuegos.
Estos vicios producen depresión, ansiedad, timidez, agresión y problemas con el uso excesivo de los teléfonos celulares. Los niños con trastorno por déficit de atención e hiperactividad son una consecuencia del problema. Se sugiere tener cuidado acerca del tiempo y contenido de los videojuegos que vean sus hijos, nietos, sobrinos o niños o jóvenes a quienes cuidamos y que también a su vez deben cuidarse evitando el excesivo tiempo frente a este nuevo vicio. Mucho cuidado con este impacto sobre la vida social y su impacto.
