Perder vacunas es una cuestión realmente horrorosa para un país que ha tenido grandes dificultades para lograr que llegarán en números importantes y que llevaran a la posibilidad del efecto rebaño que a juzgar por los números actuales, estamos aún lejos de alcanzarlo.
Lo que vemos también, detrás de una circunstancia de este tipo, es que hace falta una mayor eficacia en la tarea de comunicación y en la tarea de buscar a las personas que no han sido aún inoculadas para no perder las 100.000 dosis de AstraZeneca, que están disponibles hasta finales de noviembre.
También se había anunciado para este mes la llegada de 3 millones de dosis compradas a través del mecanismo Covax. Seguimos esperando las dos millones de dosis de Covaxin de origen indio.
Esas cantidades harían posible que alcanzaramos como mínimo el 60% de la población paraguaya inoculada; pero no hay que dejar de tener énfasis en el argumento de que necesitamos inocular a la mayor cantidad de gente posible y no es de recibo perder 100 mil dosis de AstraZeneca en este momento.
Hay que buscar los mecanismos que permitan hacer que sea eficiente dicho uso, ya que nos ha costado bastante lograr que las vacunas se radicaran en nuestro suelo.
Fuente: Asuncion.gov