Fuente: Mercociudades.org
La renegociación de Itaipú, las cuestiones que tienen que ver con la hidroeléctrica Yacyreta en la Argentina, hacen parte de lo que tendría que haber sido completamente resuelto en el ámbito del denominado Mercosur, algo que surgió en 1991, hace 30 años, y se esperaba que en ese bloque, los niveles de conflictos bilaterales serían puestos en la perspectiva del bloque.
Todo eso, sin embargo, no ha pasado de buenos propósitos, y seguimos hablando del contrabando, del cierre de fronteras, de los puentes que no se habilitan. Seguimos hablando de las mismas cuestiones que creíamos haber terminado desde el momento en que se firmó el Tratado de Asunción.
Hay que darle contenido, valor, al proceso de integración, de lo contrario, cada uno anda -como se dice en paraguayo- por su cabeza. Los uruguayos ya han dicho que quieren una negociación directa con China, sin embargo, el bloque afirma que eso no se puede hacer de forma particular de cada uno de los miembros, sino que tiene que hacerse en conjunto.
Chile, que es un socio adherente del Mercosur, tiene firmados más de 30 tratados de libre comercio y ahora va también con uno con China. Aquellos países que amenazan que aquel que haga eso será apartado del Bloque como el caso de Brasil -que sigue usando la placa del Mercosur para buenos negocios de carácter individual-, no favorecen en nada para que el proceso de integración sea real, y no meramente declamativo.