Mucho cuidado con los insultos en los estadios, modérese. Desde ahora no podrá decir malas palabras porque la FIFA puede sancionar a su país o club
El fútbol se ha vuelto más sensible y menos grosero en la forma que el hincha comunica su aliento. Los mexicanos ya no podrán gritar: puto porque eso puede derivar en severas sanciones. Los hooligans ingleses tendrán que moderarse también luego de ver lo último que ocurrió en Inglaterra en la final de la Eurocopa donde los protagonistas no fueron solo los jugadores. Los hooligans son normalmente jóvenes, que se ven envueltos en disturbios y protagonizan actos vandálicos y peleas. No se da sólo en Inglaterra la existencia de las ya conocidas cómo barras bravas. También en América Latina conocemos, escuchamos y hasta sentimos la existencia de estos grupos peligrosos que destruyen
Cambio de modelos
En México la federación local de fútbol ha debido pagar cuantiosas multas por las ofensas que los hinchas dedican a los porteros de los equipos rivales.
Ya no son solo nuevas las reglas dentro de la cancha sino también fuera de esta donde por ofensas homofóbicas a jugadores cambió la dirección y normas de juego ya no solo dentro de la cancha sino también fuera de ella, donde la buena aplicación de normas tendrá ahora un cambio de comportamiento del hincha que deberá cambiar su forma de chutar su aliento.
Nuevas fronteras
El que es miembro del movimiento LGBT sigue teniendo su agenda donde además de establecerla en un deporte seguido, admirado y alentado por heterosexuales, puntos políticos, sociales y firmes en búsqueda de sus goles en todos ellos cómo el logrado en este deporte. Ahora el integrante del movimiento que por sentirse ofendido esta trabajando con firmeza en la adquisición de derechos de ciudadanía especialmente el matrimonio, la adopción, beneficios sociales, garantías contra la violencia, discriminación y aquí el lenguaje es una de las nuevas fronteras por conquistar.
Así cómo la mujer, el hombre de color u origen diferente a la media de la población logró alcanzar su espacio y así el mismo futbol va evolucionando a ser más rápido y ofensivo sin perder tiempo en el tocar en media cancha sin perder tiempo y enervando al hincha aislado que descarga su frustración el improperio que desde ahora deberá ser moderado si no quiere recibir sanciones su club o seleccionado local.
El verbo cambiar, la acción que es un hábito y deber ser aplicada y obedecida por todos y entre ellos es que se deben acabar los agravios e insultos homofóbicos. Los ingleses han insultado a los futbolistas negros que fallaron los penales frente a Italia y se esperan sanciones igual que los insultan gritando: putos!.
