Según el último informe de Latinobarómetro menos del 30% de los habitantes de esta sub región creen en la democracia y cada año disminuyen los fieles del «menos malo de los sistemas políticos» como lo diría Churchill. no es de extrañar por lo tanto la cantidad de pro autoritarios como anti vacunas existen en el mundo occidental.
Algunos nostálgicos creen en la capacidad de bastarse a sí mismo al ser autárquico, déspota o rompiendo toda línea de trabajo y pensamiento democrático que costó como diría también Churchill «blood, sweat and tears» ( sangre, sudor y lágrimas) y no parece importarles mucho. Nuestra memoria de los 35 años de Stroessner parece muy lejana.
DEMOCRACIA INEFICAZ
Cuando el tiempo, hábitos y construcción son bajas en ciertos países es común ver intentos de volver a una dictadura en América Latina. Ahora en Francia, tierra de la legalidad, igualdad y fraternidad donde según Le Monde diplomatique se han presentado hechos singulares no vistos en años, lustros y décadas. La palabra y la realidad de tener una dictadura es posible para algunos. O sea el fenómeno no solo se da entre nosotros sino que se repite en democracias supuestamente consolidadas.
UN CONFLICTO IRRESUELTO
Con la frase: «es más fácil montar un golpe mediático que un golpe de Estado», inicia el artículo que informa sobre a publicación en la prensa de dos manifiestos de militares de extrema derecha por el “desmoronamiento” del país por culpa de los “islamistas”, los “antirracistas” y las “hordas de las periferias”. Los firmantes han participado de la tradición de los golpes de Estado. Acción habitual en dictaduras o mal administrados gobiernos que aunque en Francia no se viva todavía una dictadura, el golpe de estado no debería sacarse de las hipótesis. Los inmigrantes son un tema sensible no solo ocupan espacios sólo en sus mercados sino están bien organizados y llegan hasta niveles gubernamentales decisión y eso no gusta a muchos en Francia.
La guerra de baja intensidad no ha parado y sigue tan activa. Los atentados fundamentalistas le dan combustible a los autoritarios que creen que estas cosas se resuelven a mano dura.
Necesitamos democracias eficaces, honestas y pruebas que espanten fantasmas autoritarios. Los corruptos impunes en este «menos malo» de los sistemas políticos conocidos» le hacen la cama todos los días a los autoritarios.
