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La migración en Estados Unidos sigue siendo una cuestión central en muchos aspectos. Lo que habría que mirar también es qué capacidad tenemos para evitar una migración tan grande y masiva como la que en este momento se está planteando hacia este país, especialmente promovida por la idea puesta en términos de campaña por Joe Biden para contestar lo que anteriormente era una política de muros y de exclusión por parte de Donald Trump.
Sin embargo, Estados Unidos no tiene una gran capacidad de absorción de una cantidad también enorme de personas que quieren llegar a su territorio y forjarse el empleo y el sueño americano.
La cuestión sería trabajar con los gobiernos locales para evitar que muchos millones de latinoamericanos sigan encontrando que la única manera de poder trasladarse hacia ese mejor destino sea caminando miles de kilómetros y arriesgando sus vidas.
Es el tiempo de mejorar la calidad de gestión de nuestros gobiernos para evitar que muchos pierdan la vida en el camino y en la búsqueda de la libertad.
