Comentario 3×3
El desarrollo del coronavirus a nivel global nos ha mostrado también la necesidad de estar alerta a situaciones de este tipo. Este no va a ser el último virus ni mucho menos, y habría que estar preparado a esto, fundamentalmente asociado a la degradación que ha sufrido el medioambiente en todo este tiempo.
Con la llegada de Biden al poder el próximo 20 de enero en los Estados Unidos se abre una posibilidad optimista de recuperar la agenda global en términos medioambientales.
El jefe de Estado norteamericano electo el pasado 13 de noviembre, afirmó que desde el primer día, desde la primera hora, esa agenda será la parte más trascendente e importante de su administración.
Hay una directa relación entre el medioambiente y su degradación, y la propagación de varias enfermedades endémicas y pandémicas. Nosotros estamos padeciendo las consecuencias de nuestra degradación medioambiental en forma de dengue, que ha generado una cantidad enorme de muertos este año, casi 500, y estamos enfrentando de nuevo otro ciclo durante este verano.
Sería bueno también relacionar una cosa con otra. No creer que detrás de una situación de enfermedad endémica existe algo puntual, sino que siempre existe una causa, y que esa misma causa es la que debe ser tratada y enfrentada con ingenio, con capacidad y con coraje. El tema medioambiental es un tema número uno en la agenda global y tiene que ser también tratado con seriedad por los nuestros.