Por Benjamín Fernández Bogado
Las ayudas del gobierno en términos de Pytyvõ ha sido de G. 548.000 y constituye una forma simbólica de decir «estamos junto a ustedes». Sin embargo, eso no es verdad porque si miramos las condiciones en las que se encuentra en la actualidad el sector social más carenciado del país, todavía padecemos sus consecuencias de manera más gravosa. Es el tiempo de entender que esa cifra no es suficiente para miles de paraguayos que están acostumbrados a recibir un volumen de recursos mucho mayor. Estamos hablando de una cantidad de plata que es bastante limitada para las necesidades de la gente. Y reitero el carácter simbólico de dicho aporte, G. 548.000 para cinco meses, para incluso un mesitero de Ciudad del Este constituye un insulto. Esa gente está acostumbrada a mover economías mucho mayores que ese volumen. Podrían contentar a alguien que nunca tuvo en su vida ese monto de dinero. Pero para personas que están acostumbradas a vivir con dignidad esa cantidad es francamente un insulto.