El ser humano es violento por naturaleza, eso podemos testimoniar en las guerras entre Israel y Palestina o Rusia y Ucrania o entre barras bravas cuando se da un encuentro deportivo. Curiosamente en Francia un grupo de médicos ha solicitado documentar la violencia machista y sexual en el entorno médico. Uno que supuestamente debe ser sano, educado y respetuoso al paciente y entre colegas.
Lo que se sabe hasta ahora es que más de una de cada dos médicas dice haber sido víctima de violencia machista y sexual, según una encuesta declarativa hecha pública el miércoles 20 de noviembre.
“Las cifras nos dicen que la violencia sexual y sexista existe a gran escala en el mundo médico… Lo enfrentamos” dijo el presidente del consejo nacional del orden de los médicos, François Arnault.
Esta investigación se decidió tras la ola de testimonios y reacciones de los cuidadores publicados en las redes sociales en primavera, detrás del hashtag #metoo hospital. Dirigido por los vicepresidentes de la orden, Marie-Pierre Glaviano-Ceccaldi y Jean-Marcel Mourgues, se desarrolló en línea del 23 de septiembre al 14 de octubre.
Altos casos de violencia
Casi uno de cada tres médicos (29%) dice haber sido víctima de violencia sexual y de género. Algo incómodo y desafortunado para la víctima de este tipo de violencias. Y que cómo cualquier otra no sirve para construir o llevar adelante relaciones humanas o proyectos de bien para la comunidad de personas carentes de salud. Que finalmente son las personas que necesitan atención y cuidado en un centro sanitario.
Donde se encuentran médicos, enfermeros, personal administrativo, de seguridad y toda persona que haga viable la salud en un lugar libre de violencias o complicaciones para todos en común cómo su hogar, iglesia, donde estudie, trabaje o viva.
Con una brecha muy marcada entre mujeres y hombres: si el 54% de las médicas declara haber sufrido violencia sexual con mayor frecuencia durante sus estudios (48%), pero también en el contexto profesional (25%), esta proporción es del 5% entre los hombres.
Uno no esperaría encontrar violencia en lugares donde existan personas ya víctimas de violencia buscando recuperar o tratando su salud. Más es así, y aunque sea difícil de creer en un país con historia de logros científicos, médicos y humanos en cualquier campo.
Violencia sexual incluye:
- Violación
- Toqueteo indeseado
- Acoso sexual
- Comentarios sexuales no deseados
- Amenazas de violencia relacionadas con la violencia sexual
- Amenazas de otras consecuencias como pérdida de trabajo
- Abuso sexual infantil
- Acosamiento
- Prostitución o trata humana forzada
No hay sector social donde no veamos estos niveles preocupantes incluso entre los médicos que se suponen deberían ser más sensibles por su propia formación y educación.
