No deseo a nadie un accidente vehicular cómo el que tuve tiempo atrás, más no niego que aprendí demasiado en el tiempo de recuperación, los olvidos, caídas y una serie de accidentes más no se dan solo por errores del accidentado. A esta altura, más de 10 años después del accidente, siento y vivo mis equivocaciones cómo algo natural y me sirven siempre para aprender, conocerme más y no repetir el desacierto cometido que lastima la mente o el cuerpo.
Para poder levantarme, limpiar mis rodillas, codos, manos o lo que haya golpeado sin sentido de culpa o con malos hábitos como la autoflagelación por haber hecho o dicho algo fuera de lugar en un momento o lugar específico, voy al estado de resiliencia que es la capacidad de adaptarse a las adversidades.
Los sinónimos de este estado que son : resistencia, fortaleza, invulnerabilidad, estoicismo, adaptación, adaptabilidad, reacción, superación y ayudan a entender mejor a lo que me refiero.
Les recomiendo este estado mental a quien sea que se encuentre en recuperación de un accidente, viviendo o pasando momentos difíciles en su vida, que signifiquen dejar de lado tareas importantes en la rutina o no poder usar su fuerza mental o física para desempeñarse en una tarea particular. Es importante tener esa fortaleza que nos permite comprender la situación y emerger sobre ella.
Es importante saber que una persona resiliente es capaz de aceptar las dificultades, aprender de ellas y salir fortalecida y para lograr alcanzar este punto en la vida es importante tener en cuenta también que debemos:
- Expresar nuestras emociones y pensamientos sin dañar a los demás.
- Aceptar los cambios de rutinas, tareas y roles.
- Tener una actitud positiva
- Ser realistas
- Usar el humor
- Ponernos retos
Fortalecernos ante la adversidad
No se trata solo de personas que hayan salido con vida de un accidente sino de cualquiera que enfrente serios desafíos en sus estudios, trabajo y hasta en su socialización con la familia o amigos. Todos ellos representan los mejores grupos humanos no solo para levantarte o ayudarte si has caído o hecho algo fuera de lugar en algún momento o condición que se presente, sino sobre todo no solo para agradecer sus generosos gestos y escuchar y aprender de sus llamadas de atención.
A su vez son habituales de quien sea note que algo no hemos hecho bien y nos apunte eso que debemos tener siempre en cuenta de quien, donde y cuando sea la llamada de atención y si venimos de algún accidente, primero respirar profundo luego asegurar que escuchemos, veamos y sintamos sin problema, agradecer y seguir para delante nuestras vidas.
La vida es sabia para enseñarnos siempre solo nos queda aprender y sacar de lo profundo lo mejor de nuestra virtudes entre ellas la resiliencia.