Entre los campos relacionados a la estética no dejamos de lado nuestra dentadura que debe verse, oler y ser “perfecta” para los más exigentes que se cuidan quizá en exceso por cómo lucen, cuando en realidad lo que debe preocupar es por lo que piensen y sienten, que no se ve. De buenas a primeras más en algún momento puede darse una salida infortunada que muestre el estado de lo que llevamos en nuestra mente en relación a algo específico.
Este escrito está relacionado específicamente a los dientes, que sí nos preocupa cómo se ven el cuidado debe ser eterno y no de manera temporal, lo limpiamos, corregimos sus formas y ya está, entre los consejos médicos es importante tener en cuenta lo sgte;
- Cepillarse los dientes
- Usar hilo dental
- Dieta saludable
- Evitar el cepillado agresivo
- Evitar cambios bruscos de temperatura
- Evitar el tabaco y consumo excesivo de bebidas alcohólicas.
Mariano Sanz, El mejor periodoncista del mundo dice: «Hay que ser muy dejado para que se te caigan los dientes». Las investigaciones de Sanz se centran, sobre todo, en la relación entre la periodontitis y las enfermedades cardiovasculares y la diabetes. Además, como director de la delegación de la Federación Europea de Periodoncia, y junto con la Academia Americana de Periodoncia, intervino en el diseño y aprobación de la nueva clasificación de enfermedades periodontales, que ha sido adoptada en todo el mundo.
Mejor prevenir que curar
La periodoncia se encarga de estudiar, prevenir, detectar y tratar las enfermedades que pueden afectar al tejido que le brinda soporte a los dientes. Esto incluye las encías, el ligamento periodontal, el cemento radicular y el hueso alveolar que es un tejido calcificado que forma parte del hueso maxilar (maxilar superior o mandíbula). Alberga las cavidades o agujeros en los que reposan las piezas dentales.
Uno de los campos médicos que habitualmente tiene muchas quejas por sus elevados costes es la ortodoncia y hablamos de una especialidad encargada del cuidado de una parte importante de nuestro organismo no solo para lucir atractivos sino que por ahí introducimos los alimentos y procesamos para digerirlos bien después. Cuidar a tiempo nos puede evitar lamentarnos las consecuencias y no solo por cuestiones estéticas sino de salud en general.
