En estos días al ir a Asunción, el centro, nuestra capital,o la zona metropolitana de nuestro país me sentí consternado. Antes era un hábito practicado todos los días por tener mi facultad de Ciencias políticas en ese lugar, y que todas las noches exigía mi presencia para estudiar y aprender momentos, conceptos y todo lo que tenga que ver con la política local, internacional, del antes y ahora también. El centro de Asunción era mi territorio cotidiano.
Hace unas hora estuve de vuelta en mi ciudad de Asunción para ser testigo de un trabajo documental acerca de Salvador Allende en la Manzana de la Rivera que está a metros del Palacio de Lopez donde esperamos que nuestro presidente y su equipo estén pensando, diseñando y ejecutando tareas a favor del Paraguay . Era paradójico mientras veía y escuchaba como echaron a Allende del poder en el Palacio de la Moneda en Chile pensaba que hacia Peña en nuestro palacio presidencial.
En medio de injusticias e inequidades
Me tocó conocer algo más de un pretérito no local sino regional por haber visto parte del documental “Salvador Allende, de Valparaíso al mundo” del chileno Luis Vera quien en un homenaje al ex presidente, chileno y referente socialista de este país enseño en el tiempo que gobernó y vivió cómo médico y político, el trabajo real de un socialismo para y por la gente que hoy día ha cambiado mucho a lo planteado y hecho hace más de 50 años atrás. La exhibición no pudo concluir por problemas técnicos pero el debate sirvió para pensar sobre lo que significa gobernar en una América Latina injusta e inequitativa.
Al salir fue al café del Teatro municipal y he visto como perseguían a pedradas a una mujer con un cuchillo en la mano y con claros signos de estar intoxicada con drogas, Bis dijeron que era una escena común, de todos los días lo que hace que a partir de las 10 de la noche la capital nuestra se convierta en un territorio de peligro, delincuentes y decadencia. Las mismas que denunció y fue víctima Salvador Allende.