Comentario 3×3
Por Benjamín Fernández Bogado
El Paraguay ha vuelto a endeudarse, esta vez por US$ 1000 millones alcanzando casi el 30% del PIB a US$ 40 mil millones, este PIB disminuirá notablemente este año por efecto de la pandemia, eso significa que estaríamos hablando aproximadamente entre US$ 34 a US$ 35 mil millones de dólares con mucha suerte el PIB, y US$ 10 mil millones de dólares en esa ecuación casi significa un tercio de todo lo que produce el país, es a partir de ahora deuda, que tendrá que ser pagada para que el Paraguay mantenga sus niveles de confiabilidad hacia fuera y hacia adentro, y que se llevará casi US$ 500 millones de servicio de deuda anuales.
El gobierno no quiere tocar su base electoral que son los 320 mil funcionarios que si se hubiera aplicado el hecho de que cada uno de ellos durante este tiempo que dura la pandemia solo cobrara el 50% podríamos evitar endeudarnos, ir a golpear las puertas de los bancos, pero eso significaría, enojarse con el electorado que cada momento de convocatoria termina votando por el partido que le consiguió el trabajo o el salario, que sería lo más adecuado decir.
El Gobierno podría también haber implementado otras cuestiones importantes, un mejor cuestión en la compra de insumos, solo del agua tónica de Petropar hubo una sobrevaluación de casi el 600%, se calcula que en todo lo que compra el estado que es aproximadamente US$ 4 mil millones hay una coima, una cometa, una corrupción de entre el 20% y 30%. Eso significa que si tuviéremos la voluntad desde el Gobierno de evitar que haya corrupción en la compra, podríamos haber tenido fácilmente US$ 1200 millones anuales, y eso nos hubiera evitado ir a golpear la puerta de los bancos, endeudar al país en un tercio de su PIB y dejar una pesada herencia para las generaciones futuras.