El síndrome de inmunodeficiencia adquirida o también conocida cómo sida ya tiene más de 40 años entre nosotros y desafortunadamente es una enfermedad que se ha llevado muchas vidas en el mundo. La misma que nos genera tantos problemas para la salud quizá en la misma cantidad que su población y que tiene en su agenda diaria cómo prioridad el cuidado de uno y su entorno social para lograr continuar bien su viaje en la vida.
Ella, la vida, debe ser la preeminencia de todos si queremos seguir andando en paz, sin dolor o molestias que no debemos dejar pendientes siempre de químicos que pueden acumularse en nuestra cocina sin efecto alguno por no estar acompañados de hábitos sanos que aseguren su funcionamiento en nuestra vida. cuya mejor amiga es la salud. El sida ha sido combatido fuertemente desde hace años con buenos resultados.
La misma es una epidemia porque afecta a todos los países del mundo y resulta un tipo de enfermedad desagradable por su grado de mortalidad y que vaya destruyendo de a poco las funciones de nuestro organismque necesita tener órganos afinados y en buen estado para hacer sonar bien la melodía de la vida en nuestra existencia.
Por eso y para eso hay organismos e instituciones que trabajan en el mundo con el fin de regular problemas y asegurar el tránsito de vidas sanas en el planeta cómo la ONU que ve posible la erradicación del sida en 2030, pero pide mayor financiación y equidad. En 2022 alrededor de 630.000 personas murieron de enfermedades relacionadas con el sida en todo el mundo.
Las recomendaciones para evitar contraer la enfermedad ya son conocidas más nunca está de más recordarlas;
Usar condones correctamente cada vez que tenga relaciones sexuales. Hable con su pareja acerca de tomar PrEP. Si se inyecta drogas, no comparta sus agujas, jeringas u otros instrumentos con su pareja. Por lo que significa facilitar la introducción o tránsito de la sangre o lo que pueda dañarnos.
Una labor en conjunto
Y para evitar que esto ocurra o siga ocurriendo debemos tener en cuenta y aplicar la conciencia y acción colectiva no contra el infectado por sida sino inmunizandonos no con con vacunas estilo época de lucha contra el covid sino hacerlo a través de vidas y prácticas sanas que ayuden a protegernos y mantenernos lejos de asistencia sanitaria. Ni tampoco de la dependencia de farmacéuticos que tienen su costo y en algunos caso molestia por sus medios de introducirlos en nuestro cuerpo.
Se requiere de un fuerte liderazgo político y de mayores inversiones financieras, advierte el nuevo informe del Programa Conjunto de la ONU sobre el VIH/sida (ONUSIDA) sobre la evolución de esta enfermedad.
«El camino hacia el fin del sida no es un misterio, sino una elección política y financiera», subrayó al presentar el informe la directora ejecutiva de ONUSIDA, la ugandesa Winnie Byanyima.
Byanyima aseguró que éste «es el mismo camino que ayudará a las sociedades a estar preparadas para futuras pandemias y ayudará a los países a alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible» que va más allá de lo que se haga o dependamos del trabajo de instituciones públicas, ONGs o cualquier asociación u organismo que exista para trabajar para promover y cuidar nuestra salud. Debe ser un compromiso colectivo.
La única salida real y posibilidad de erradicar serios problemas cómo el sida depende sobre todo de nosotros, nuestra conciencia y trabajo cómo equipo para golear a pandemias cómo hemos logrado con las siglas COVID, viruela, tifus, peste y cólera con nuestra capacidad científica y por sobre todo con el trabajo común del terráqueo que que deseamos continuar viviendo y en buen estado para evitar molestarnos o molestar nuestros entornos humanos. Que existen sobre todo para construir vidas y no destruirlas cómo lo hacen dolencias cómo el SIDA o cualquier problema que llegue a ser pandemia no por negligencia de gobiernos sino por carencia de responsabilidad particular y colectiva para controlar y terminar el tránsito de siglas cómo el VIH que no es nada cómoda tenerla encima y el moverse y transitar en la vida en compañía de ellas.
La ONU le puso fecha a la posible erradicación del sida, que sería posible realmente terminar de vuelta si la financiación, programas y trabajo vienen del habitante de la tierra que no quiere morir o vivir mal en su casa o nuestro planeta.