La Secretaría de Emergencia Nacional se pronunció en referencia a los daños que causó el tornado en el distrito de San Joaquín, ciudad de Caaguazú mencionando que darán asistencia a los afectados y proporcionarán los enseres necesarios.
La Secretaría de Emergencia Nacional actualmente se encuentra trabajando de manera coordinada con autoridades del municipio de San Joaquín de manera a brindar ayuda a las personas que se vieron afectadas por un tornado que derribó varias viviendas el pasado miércoles.
Gladys Borja, ministra de la SEN, detalló que según informaciones preliminares recolectadas por los técnicos de la institución fueron unas 40 familias las afectadas por el tornado, de las cuales cinco sufrieron el derribo total de sus viviendas.
A las familias se les proporcionó una asistencia de emergencia con provisión de carpas, colchones y frazadas para una respuesta inmediata; en relación a las familias que sufrieron la destrucción total de sus viviendas, se contempla construir viviendas provisorias con puntales, madera terciada y chapas, informó Borja. Se espera la ayuda por parte de la gobernación de Caaguazú y del municipio de San Joaquín.
Al mismo tiempo se encuentran asistiendo a otros afectados en San Pedro, Guairá y Presidente Hayes, tras la tormenta con intensos granizos que se registró. También se proporcionaron alimentos a poblaciones indígenas más afectadas y la institución se encuentra trabajando en la provisión de agua potable a familias del Chaco paraguayo afectadas por una prolongada sequía. “Son 11 camiones cisterna para el traslado y provisión de agua a familias afectadas por la prolongada sequía que afecta a la región”. Más de 30 millones de litros de agua ya llevamos proveyendo al Chaco desde enero, nuestras cisternas ya no vuelven en ocasiones por la dificultad de las rutas” declaró.
Pobladores de la zona que se vieron afectados mencionaron que sufrieron varios daños, tanto físicos como materiales, ya que resultaron heridos y perdieron sus cultivos y sus animales.
La Dirección de Meteorología por su parte, informó que el fenómeno climático fue de categoría baja y que es complicado poder determinar cuándo ocurrían este tipo de eventos ya que no se cuentan con los elementos tecnológicos. A su vez se emitió un comunicado alertando sobre tormentas eléctricas severas que afectarían a varios departamentos con alta probabilidad de lluvias, ráfagas de viento y caída de granizos.
Uno de los fenómenos climatológicos más violentos registrados en Paraguay ocurrió un 20 de septiembre de 1926; a ese evento que en la actualidad se lo conoce como el “Ciclón de Encarnación”. Las ráfagas de viento de hasta 200 kilómetros por hora se llevaron cerca de 400 vidas, aunque no se tiene una cifra exacta de las víctimas.