Nuestra Señora de la Asunción celebrará el 15 de agosto 485 años de su fundación. Lastimosamente en un escenario con muchos y graves problemas y con enormes pasivos sociales, ambientales, económicos, urbanísticos y de gestión.
Para muestra un botón: La informalidad habitacional de Asunción ha crecido hasta un 20 % de su población. De los poco más de 500.000 habitantes que vivimos aquí, unos 100.000 lo hacen en los Bañados de Asunción. En muy malas condiciones y en situación de marginalidad. Ello es consecuencia de una pésima gestión política en las últimas 7 décadas, tanto a nivel de Gobierno Nacional como de Gobierno Municipal. Se trata por lo tanto no solo de un tema municipal sino que es un asunto de alcance nacional.
Por otro lado, la Municipalidad de Asunción se ha convertido en una organización absolutamente inviable. Con las enormes falencias y las debilidades que todos conocemos. La Municipalidad de Asunción ya no puede administrar y ni gestionar el funcionamiento de la Ciudad en estas condiciones. Mucho menos el desarrollo integral de la misma, que es una función fundamental e ineludible de un Gobierno Municipal.
Resulta imprescindible que entendamos que la Ciudad es un Sistema. Recordemos que un sistema es un conjunto de elementos relacionados que interactúan entre sí y que funcionan como un todo o que constituyen una entidad. Hay 3 palabras clave que tienen directa relación con el significado de la palabra Ciudad: Civis, Polis y Urbis. Pero estas palabras se refieren a distintos componentes de la misma: la Sociedad -la ciudadanía-, el Gobierno de la Ciudad -la política- y lo Urbanístico –el territorio físico-. Los cuales son 3 elementos esenciales de la Ciudad, que constituyen un Círculo, que generalmente es Vicioso y que debemos saber convertir en un Círculo Virtuoso para posibilitar un desarrollo integral de la misma.
Para cambiar la realidad, en el ámbito que sea, es imprescindible contar con un Proyecto. Resulta muy curioso que un asunto tan sencillo como éste sea de tan difícil comprensión y entendimiento en nuestro país. Y es notable sin embargo constatar que en nuestro medio no se habla, no se analiza y no se discute el tema de la Ciudad. Que es un tema central para cualquier país y para cualquier sociedad.
En nuestro país estamos acostumbrados a pretender que una persona -un Intendente o un Presidente- lo resuelvan todo. Es decir, creemos que la Polis debe solucionarlo todo. Y ese es nuestro grave error. Las ciudades que funcionan y se desarrollan -y los países también- no lo hacen por arte de la magia o por obra de un milagro. Lo hacen porque han sabido articular y hacer funcionar estos componentes. Ciudades como Curitiba, Barcelona, Copenhague o Medellín -o países como Dinamarca, Corea, Singapur o Taiwán- no están como están porque sí nomás.
Está comprobado que la Polis –los políticos- no va a cambiar esta triste realidad que tenemos que sufrir. Sobran las evidencias. Entonces aquí entra el compromiso y el rol activo de la Civis. El desarrollo del “Capital Social” y el involucramiento de las Organizaciones de la Sociedad son imprescindibles para lograr el desarrollo sustentable -Desarrollo Social con Crecimiento Económico y Cuidando el Ambiente-. No existe otro modo.
Cabe mencionar que existe una iniciativa ciudadana creada recientemente –un nuevo intento más- que se llama “Asunción Causa Nacional”, que agrupa a más de 30 OSCs y cuyo fin es justamente contribuir desde la Civis a la recuperación y el desarrollo nuestra Capital.
Tratándose de una gran construcción colectiva la Ciudad -y con la plena certeza de que se puede- la primera y gran pregunta que debemos hacernos es: ¿Queremos hacerlo?
