Un exfutbolista brasileño nacionalizado en Ucrania, que jugaba de mediocampista en el F.C. Metalist Járkov de Ucrania, había sido llamado por el ejército para ir a la guerra.
Edmar de Lacerda estaba cansado de no ser convocado con la Canarinha y había decidido cambiar de nacionalidad; sin embargo, sus planes no salieron como lo esperaba. El exfutbolista se casó con una mujer ucraniana y desarrolló toda su carrera en la liga de ese país.
Esta historia empieza en 2002, cuando el exjugador brasileño Edmar de Lacerda decidió aceptar una oferta del Tavriya Simferopol para abandonar el Internacional de Porto Alegre y dar un nuevo rumbo a su carrera futbolística.
Luego de ser fichado por el Tavriya Simferopol de Ucrania, donde brilló y se destacó, hizo que otro equipo importante como el FC Metalist se interesara por sus servicios. Lacerda permaneció jugando en la península de Crimea en el Tavriya Simferopol hasta 2007, cuando decidió dar el salto al Metalist, cuyo dueño, Oleksandr Yaroslavsky, era uno de los hombres más ricos del país, relacionado con la construcción y las finanzas, según el medio Libertad Digital.
Las cosas transcurrían bien para el exjugador brasileño que además hizo de Ucrania su país de adopción. Mientras estuvo en la nación de Europa, conoció y se casó con Tetiana Halovskyi, de quien tomó los apellidos, y decidió naturalizarse como ucraniano, para tener la oportunidad de brillar en algún Mundial.
Sin posibilidades de jugar con la selección de Brasil, el ya conocido como Edmar Halovskyi, aceptó la llamada de la selección ucraniana para vestir la camiseta nacional. El 10 de agosto del 2011 disputó su primer partido para comenzar una andadura de un total de 11 partidos con el combinado nacional ucraniano.
El exfutbolista estuvo a punto de conseguir que Ucrania jugará el Mundial de Brasil con un gol en la ida de una sufrida repesca ante Francia, que finalmente les dejó fuera.
Una mañana mientras estaba en el centro de entrenamiento del Metalist, recibió la llamada de su mujer. Le comunicaba que había recibido una carta para alistarse en el ejército ucraniano y combatir contra los rebeldes prorrusos.
«Estaba en mi club cuando mi mujer me llamó diciendo que me habían enviado una carta con una convocatoria para presentarme a combatir con el Ejército ucraniano. Fue una locura. Mi esposa se desesperó, pero dije que no había la más mínima posibilidad de presentarme», aseguró en esa época a una entrevista para Globoesporte en Brasil.
El conflicto entre Ucrania y Rusia, conocido como Guerra del Donbás, empezó el 12 de abril de 2014, seis años después de haber sido nombrado como ciudadano europeo, por lo que Lacerda fue llamado a hacer frente.
Aunque parecía que iba a tener que tomar armas y enfrentarse a los rusos, la directiva del Metalist logró solucionar la situación. «Consulté sobre la situación a la directiva del club y se resolvió todo, aparentemente fue un error del ejército. No quiero ni pensar en esa posibilidad, creo que todo fue resuelto y sólo quiero pensar en jugar al fútbol, que es lo que sé hacer”.
“En 2004 hubo una revolución en Ucrania, pero fue pacífica, nunca vi nada parecido», señaló en aquel entonces el futbolista. El exinternacional ucraniano Edmar Halovskyi tuvo un conflicto en el FC Vovchansk del equipo Druha Liha en el año 2021. Se encuentra ejerciendo la función de segundo entrenador.
Jorge Rojas, exfutbolista de Olimpia, Cerro Porteño y Sol de América, llegó a Ucrania para fichar con el Metalist Kharkiv. El pasado viernes se sometió a los exámenes médicos y firmó hasta junio con chances de prorrogar el contrato.