Natura dio el salto
La resistencia al cambio es natural no sólo en el ser humano sino en todas las especies, tal vez por aquello de que “natura non facit saltus”, esto es, la naturaleza no da saltos abruptos sino que evoluciona paulatinamente. El COVID-19 nos impuso un comportamiento por completo opuesto al que veníamos teniendo históricamente. Los estadios rebosantes de espectadores, los conciertos multitudinarios, la gente apiñada en bares y restaurantes, o haciendo cola para entrar a un teatro o para apiñarse en algún centro nocturno cerrado herméticamente para bailar, escuchar música y tomarse unos tragos…
Todo eso es historia.
No podremos volver al trabajo como lo hacíamos hasta diciembre de 2019. Tampoco las escuelas, los colegios y las universidades podrán recuperar su ritmo anterior, con aulas r...