Solo sea feliz

La felicidad es el estado de grata satisfacción espiritual y física que se nota en el grado de alegría  que uno exprese en reuniones sociales o cuando tiene la oportunidad de estar con otras personas. Debemos saber también que la felicidad puede mejorar la salud física y mental, y ayudar a prevenir enfermedades. Por ejemplo, puede fortalecer el sistema inmunitario, aumentar los linfocitos e inmunoglobulinas, y reducir el dolor de donde venga.

También puede puede mejorar la interacción social y las relaciones con otras personas. Sonreír es contagioso y puede generar un ambiente más amable y agradable entre quienes nos toque trabajar, estudiar o simplemente vivir.

Es recomendable e importante  empezar, desarrollar y terminar nuestros días con felicidad para nuestro y el bienestar de las personas que nos rodeen. Ahora es habitual tener publicidad de lo que sea con música, colores y personas sonriendo o expresándose con felicidad si viste o consume lo promocionado y también existieron y  existen otras formas para ser felices a través de vicios peligrosos que han sido creados para ser  adictos a los mismos. Los mismos  pueden ponerlo feliz más el resultado que presenten el abusar de beber, consumir, adquirir o aspirar lo que haya visto o escuchado por el mercadeo o por lo que sea que nos hayan dicho o compartido terceros en quienes confiamos para estar en ese cómodo estado en el que deseamos prevalecer no acaba bien.  

Fórmulas simples

Para estar feliz recomiendo descansar y alimentarse bien, estar limpio, tener y repetir buenos y sanos hábitos cómo caminar, nadar, pedalear o limpiar y ordenar los entornos que frecuente. Si lograr sostener esta rutina no solo logrará verse más atractivo o encontrarse en un lugar ordenado y aseado sino sobre todo encontrarse feliz que es más que estar sonriendo, cantando o diciendo cosas chistosas sino sobre todo estar, fortalecer y sostener su salud mental y física. Por otro lado se sostiene también que la gente feliz tiene tres cosas: disfrute, satisfacción y significado.

No soy psicologo, neurologo o psiquiatra para responder exactamente las inquietudes que tenga alrededor de nuestra cabeza y cómo hacer para que esta esté siempre contenta sin estimulantes, alimentos, bebidas nocivas o haciéndonos de cosas que no usaremos con frecuencia o para lo que haya sido adquirida. Pero vale la pena leer sobre experiencias que nos hacen felices. 

Escribo desde el rincón o ángulo de ser humano común que busca como todos allí afuera, ser feliz. Tomando cómo referencia no solo lo proveído por el mercadeo sino también lo que lea de personas especializadas y abocadas a estudiar, evaluar y asistir a personas que no sean felices y por dicho motivo no puedan trabajar, relacionarse o estar incómodas en sí mismas.

Marian Rojas Estapé, psiquiatra y experta en bienestar dice: «La felicidad depende del sentido que le doy a mi vida». Algo que le puede parecer un punto muy intenso para entenderlo pero solo se trata de fijar el destino al que deseamos llegar y cómo lo pretendemos hacer; la manera de cómo viajaremos para aterrizar o arribar al puerto en el que seremos felices.

Hay gente que está feliz en el calor y otras en el frío, para el primer grupo Paraguay o cualquier país caribeño ahora es su alternativa para estar jovial por lo que informa meteorología para nosotros esta semana e incluso para las que vienen del primer mes del año y habitualmente el primer semestre. Tiempo en el que será habitual pasearnos o congregarnos alrededor de nuestro típico brebaje o tereré bajo la sombra generosa de algún árbol o entre cuatro paredes que contenga un equipo de aire acondicionado o ventilador que ayudan a hacer más placentero y feliz el tiempo que dediquemos a la socialización.

El mismo que de acuerdo al tema conversado, cómo se lo aborde o quienes formen parte de la congregación puede terminar haciendo feliz la oportunidad de estar en forma presencial con quienes tengamos la oportunidad de reunirnos.