La salud no es solo lo más importante que tenemos en la vida, sino es todo y debe estar bajo cuidado y atención permanente para evitar que cualquier virus ingrese a nuestro organismo y destruya su interior y exterior así mismo.
Hace poco en Ciudad del Este se dió un episodio trágico que alcanzó al mundo con una publicación en video de un caso de miasis o la infestación de tejidos u órganos (principalmente de ojos, piel, nariz, senos paranasales, garganta e intestino), vivos o muertos, por larvas de moscas, escenas muy feas de un hombre con la cabeza y rostro con miasis acostado en el piso que a su vez es el reflejo del estado del sistema de salud en el Paraguay. El mismo que debe funcionar para atender y responder a tiempo y bien casos cómo estos que al estar expuestos cómo el del caso descrito pone en riesgo cualquier vida cercana. Mientras era filmado con gusanos que lo consumían todo el ministro de salud Borba era operado de una clavícula en un hospital de Sao Paulo.
La salud de un país no puede estar bajo riesgo ni ser retratada en pequeñas escenas indignas que solo generan repudio y repulsa. Mal andamos en salud pública. El pais está enfermo y nuestros administradores viven asegurados en sanatorios privados con un gasto de 100 millones de dólares anuales.
Alguien me dijo: “ -Iñaki slo mirá este caso y compáralo a la forma en que se encuentran nuestros hospitales y cómo es atendido el paciente en el país dentro del lugar que se debe destacar por su orden, limpieza, empatía y buena gestión en la atención que desee tener la persona que acude al hospital”. Todo mal para un centro de atención que argumenta que es una persona que vive en la calle y que no tiene parientes como si todo eso fuera un argumento para justificar su condición de vida miserable.
Este caso también sirve para entender que el enfermarse en nuestro país puede representar el camino a la desgracia por no tener suficientes fondos para cubrir la atención y equipos que se necesiten para atender a enfermos y sus problemas.Últimamente con lo identificado cómo chikungunya se han elevado complicaciones en muchas personas, que no se dejan de quejar por el dolor que produce lo que inicia el maldito mosquito y la atención pública a pesar de la inversión durante el covid de nuevo colapsado.
Un caso conmovedor
El hombre que fue filmado con miasis en su rostro se trata de de Esteban Verdún, de 38 años, quien está en situación de calle desde hace unos diez años, sin algún familiar en la zona, según el director del hospital de CDE el Dr. Schroder, quien refirió la necesidad de Centros de Rehabilitación que se ocupen de casos así, pero también de otras instituciones porque son situaciones complejas que deben ser abordadas en forma integral.
Ahora previo a las elecciones, solo espero que los candidatos y sus equipos hayan visto esta atroz filmación que tiene mayor entrada y aceptación ser expuesta en un filme de terror que abierto al público del mundo que aconsejo no lo busquen ni aprecien por el duro golpe psicológico que puede causar el ver cómo la miasis consume el rostro y el cerebro de un ser humano en el piso esperando ser atendido y curado, que afortunadamente ya ha sido así, más no podemos seguir viendo o escuchando padecimientos de personas.
En los pasillos de hospitales que deben relucir por garantizar la atención, seguridad y sanación de problemas que son habituales en países tercermundistas o en desarrollo nadie estuvo para auxiliarlo. Tirado en la entrada del hospital mostraba la miserabilidad de la salud pública en el Paraguay. La escena es suficiente para concluir que el país está agusanado.