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Renovadas promesas políticas

Estamos a un mes de los comicios internos de los partidos de cara a las generales de abril de 2023 y es importante ver en que se sostienen las candidaturas. 

El prometer consiste en el decir, hacer o manifestar  algo, comprometiéndose y obligándose a ello, que a su vez sólo tiene sentido si logra uno hacerse de confianza  si la promesa es cumplida. Existen promesas que dependiendo de donde vengan ya tienen suficiente capacidad de generar confianza que serán cumplidas o de lo contrario: ser rechazados. 

La política desafortunadamente en Paraguay no es un origen confiable por lo desgastado que se encuentra por promesas acabadas siendo mentiras o no alcanzadas porque no existieron planes o programas para ejecutar en beneficio de la ciudadanía. La política parece haber perdido el sentido del bien común.  

La democracia, el menos malo de los sistemas políticos como decía Churchill está en deuda con la gente desde hace tiempo. 

Latinoamérica  no se destaca por sostener y manejar bien el estilo de vida democratico que solo tiene sentido si los que integramos un país que viva bajo este sistema trabajemos juntos  mejorando la calidad de vida de la gente y su inteligencia a la hora de votar. 

Hoy sabemos mucho de los candidatos pero por lo tanto el  prometer sin fundamento ni trayectoria ya no alcanza.  Debe  lograr cumplir lo que haya salido de su boca en sus campañas políticas o posterior a ella una vez ganado o no elecciones.

Previo a una de las más importantes  citas a  las presidenciales, estaremos escuchando o viendo muchas promesas que deben ser cuidadosamente percibidas para que tengan así una justa presión para lograr que estas se cumplan bien.

 

Estas elecciones  se basan en escoger el cargo más importante en toda democracia, el de presidente, pero también están en juego muchos otros cargos relevantes donde el mandante, el elector será fundamental. Esta es una prueba de madurez e inteligencia de la ciudadanía. 

Exigir mas

En Brasil ha ganado Lula Da Silva  quien promete por ejemplo desde el 1 de enero que asumirá el cargo a  deshacer la degradación ambiental y detener la deforestación que se dió durante el gobierno de Bolsonaro. 

Una de las tareas más complejas cómo el reducir el nivel de corrupción o contaminación socio ambiental porque se daña así negocios que funcionan deforestando o contaminando nuestro hábitat. Esto también tiene que ver con el Paraguay que tiene uno de los índices más altos de deforestación, casi 8 millones de hectáreas al año pero no hemos escuchado en boca de los candidatos nada en torno a este tema. 

Es importante madurar y crecer como ciudadanos exigiendo cada vez más a nuestros políticos. Contentarnos con lo poco es capitular como ciudadanos.

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