La Dra. Liz Fernández, presidenta de la Sociedad Paraguaya de Medicina Crítica y Cuidados Intensivos, en entrevista con este diario, confirmó que las camas para pacientes respiratorios ya están del 95 al 100% de su capacidad, y a nivel de polivalente, por encima del 80%, que son las patologías que necesitan otro tipo de atención como un infarto al miocardio, un accidente cerebro vascular, un politraumatismo, etc.
Para la presidenta, la solución es seguir insistiendo en la cuarentena social, que se salga de la casa solo lo necesario y disminuir el nivel de contagio de la población. También es importante identificar dentro del hospital aquellos pacientes graves que se pueden beneficiar con un ingreso de forma temprana en las unidades de terapia intensiva.
Además, señaló el hecho de tomar el tiempo a los pacientes de tal forma que su estancia pueda ser de 1 semana a 10 días y no de 15 días a 3 semanas. Se dan los casos de que muchos pacientes llegan tarde y terminan falleciendo.
EN EL INTERIOR
La doctora Fernández aseguró que todo está centralizado en Capital y si bien es cierto que con este nuevo Ministro de Salud hubo un crecimiento de las terapias intensivas en lugares como Encarnación, Villarrica, Ciudad del Este, el incremento de camas sigue siendo insuficiente, por lo tanto hay una sobrecarga a nivel social.
“Hay un déficit de camas y todo lo que falta en el interior va terminar colapsando el nivel de terapia intensiva en Central y Capital”, refirió la doctora.
Asimismo, apuntó que todos los países a nivel regional han pasado por esta situación lamentable y tienen como un punto de subida, un punto potente y fuerte que Paraguay también va a pasar, y luego habrá un momento en el cual tendrá que disminuir.
“Estamos entrando en la parte media donde el sistema sanitario puede llegar a colapsar. Esperamos tener la cantidad de insumos, gente capacitada al frente, y equipos de protección personal, para dar respuesta a la población”, afirmó.
¿Y EL SECTOR PRIVADO?
La situación se hace más insostenible porque casi no se puede contar con los centros privados de atención médica, ya que presentan una ocupación del 75% de las camas de terapia intensiva.Todos los hospitales privados tienen 270 camas en esta unidad, pero solo el 25% estaría disponible a la fecha.
“Mi aliento era que el sector privado siempre tenía muchos lugares, porque su ocupación era del 30% al 50% y ahora están con un nivel alto del 75% de ocupación, aproximadamente”, refirió en contacto con radio Monumental 1080 AM, la directora de Terapias del Ministerio de Salud, Leticia Pintos.
Sin embargo, el escenario actual todavía no obligó a las autoridades sanitarias a realizar un traslado masivo de pacientes con Covid-19 a estos sitios. La directora de Terapias resaltó que la estadía de un paciente Covid-19 en la Unidad de Terapia Intensiva es de entre 15 a 18 días, que se suman a otros 10 días de conexión a una máquina antiflujo y otros 7 en salas de internación común.
Además, las jornadas laborales de los profesionales de blanco se extienden hasta 12 horas, dado a que exponerse más tiempo tornaría la labor en una actividad insalubre.
ALERTA ROJA
Central está al borde de la alerta roja por coronavirus. Actualmente, solo quedan entre 8 y 10 camas de Unidad de Terapia Intensiva (UTI) en la red hospitalaria de atención respiratoria.
Este Departamento es el más poblado del país y aparece en la lista del Ministerio de Salud con el de mayor cantidad de casos de Covid-19, se ha registrado 50% de aumento de casos semanales. “La semana pasada tuvimos un promedio 340 casos por día, así vamos llegando a una parte complicada de la pandemia”, explicó el Dr. Roque Silva, director de la XI Región Sanitaria, en comunicación con La Unión.
Manifestó su preocupación por el rápido aumento de ocupación de camas en Central, donde incluso está el Hospital Nacional de Itauguá, que cuenta con los pabellones de contingencia exclusivos para pacientes con COVID-19.
“Tenemos un 90% de ocupación de camas de terapia intensiva. Tenemos un margen pero que no nos permite relajarnos”, concluyó el doctor Silva.
