El Congreso unicameral de la nación andina votó 60-40 a favor de admitir la moción de juicio político, un quórum superior a los 52 votos necesarios; mientras que 18 legisladores se abstuvieron.
El juicio político de Vizcarra se debatirá y votará el 9 de noviembre, una vez que el presidente o su abogado hayan presentado su defensa en la cámara de 130 escaños. Si la moción recibe 87 votos, será destituido del cargo y reemplazado por el presidente del Congreso hasta que se celebren elecciones.
Aunque Vizcarra no tiene representantes en el Congreso que lo defiendan, parece poco probable que la oposición lo expulse. Sigue siendo un líder popular y encuestas recientes sugieren que la mayoría de los peruanos se oponen al juicio político y quiere que enfrente una investigación después de que termine su mandato en julio. El país celebrará elecciones generales el 11 de abril.
El presidente sobrevivió a su primer juicio político el 19 de septiembre después de que solo 32 legisladores votaran por su destitución tras, supuestamente, intentar interferir en una investigación de corrupción contra miembros de su Gobierno.
Legisladores de varios partidos dijeron que, aunque están a favor de iniciar procedimientos para obligar a Vizcarra a presentar su defensa en el Congreso, eso no significa que votarán por su destitución. Diethell Columbus, congresista del partido Fuerza Popular, dijo que Vizcarra debería tener la oportunidad de responder a las acusaciones; que lo menos que se puede hacer es admitir la moción de juicio político, para luego ver el tema subyacente.