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Políticos con escuela

La semana pasada la nota fue “Políticos sin escuela” y aquí va lo prometido. No estoy hablando de formación universitaria, lo cual es esperable, aunque no imprescindible para contar con los conocimientos que califiquen a un político o aspirante a la política. Existen en toda América Latina y resto del mundo, espacios de capacitación al cual son invitados frecuentemente los parlamentarios, concejales e intendentes. Oportunidades sobran en OEA, Naciones Unidas, MERCOSUR y otros organismos multilaterales.

El problema es si, a la persona a capacitarse, le interesa más el viaje, los shoppings y atractivos turísticos más que los conocimientos. No me alcanzarían todas las páginas de una edición de El Independiente, para recordar las andanzas y cursos desaprovechados en los últimas tres décadas. Y solo hablo de los publicados por los medios. Debe haber una buena cantidad de travesuras y diversiones realizadas a costa del dinero del Estado, que no se hicieron públicas. Pero el espíritu de esta nota no es arrojar sospechas y desconfianzas al azar, sino compartir algunas buenas prácticas, que ocurren en otros países y que serían muy bienvenidas por la ciudadanía en tiempos electorales, donde los aspirantes o candidatos/as, se comprometan con algunas de ellas para comenzar con algo distinto a lo que nos tienen acostumbrados hasta el hartazgo.

Vamos por parte. No solo es conocimiento, también actitud, responsabilidad y respeto de lo ajeno. Comparto el ejemplo de políticos suecos, que tienen una buena escuela y mucho para aprender de sus regulaciones y costumbres. Que allá hace frio y aquí calor, es solo una cuestión climática. Nuestros políticos no viven sin aire acondicionado, de modo que la diferencia es nimia. Por otra parte, si tanto nos gusta copiar lo ajeno, mejor que empecemos por copiar lo bueno.

A cada inicio de mandato, los diputados suecos reciben -igual que el presidente del Parlamento- una tarjeta anual para utilizar el transporte público. “Los autos oficiales son pocos y de uso limitado. Solo tres vehículos modelo Volvo S80 están a disposición del Presidente del Parlamento y sus tres vicepresidentes para actos oficiales.”

Hasta 1957 los diputados del Parlamento sueco ni siquiera tenían salario: solo recibían las contribuciones de los miembros de los partidos. El salario se estableció cuando concluyeron que “ningún ciudadano debería verse impedido de convertirse en diputado por razones económicas».

En el parlamento cada uno paga su café. No hay mozos y si bien existe un lugar para comer, cada parlamentario debe dejar sus platos al lado de la cocina. Además, ningún diputado sueco tiene derecho a reembolso por comidas en restaurantes de lujo. Mucho menos ascensoristas. Se presume que todo el mundo tiene diez dedos y sabe leer los números del 1 al 20. Aquí tenemos 16 ascensoristas para 2 ascensores y por ende un jefe. Como si fuera poco, no debemos olvidar otro célebre jefe. El de fotocopias, quien gana nada menos que G. 14.652.000. También una Dirección de Impresión, cuya retribución mensual es de más de G. 12 millones sin contar gratificaciones trimestrales. ESTA ES NUESTRA ESCUELA. Se ha difundido hasta el cansancio por todos los medios, más allá de su orientación política o línea editorial, pero todo sigue igual.

Aquí viene la parte más dificultosa de las lecciones suecas. «Ningún diputado tiene secretaría particular ni puede contratar asesores;101 funcionarios trabajan en conjunto para 100 diputados.” Esta gente es cruel. No saben lo que es tener una buena secretaria y la productividad que la misma ofrece. Curiosamente son muy pocos los políticos con secretarios, debe haber una deficiencia que este autor desconoce o bien carezco de la objetividad de nuestros políticos masculinos. Según el politólogo sueco Rune Premförs, que los parlamentarios tengan asesores particulares es una aberración. «¿Por qué todos esos recursos deberían estar a disposición de un solo político si se pueden compartir? Los representantes políticos también deben ser representantes del pueblo en términos de no atribuirse condiciones privilegiadas». Suspenda su asombro, Suecia es parte del planeta Tierra.

Manual de viaje: aunque Ud. no crea hay un texto de 35 páginas titulado “Reglas de
Viaje”. Para hacerla corta, en los viajes al exterior un parlamentario solo puede gastar 5.400 dólares a lo largo de 4 años y debe presentar un programa detallado del viaje de trabajo, que es sometido a la aprobación de la presidencia del Parlamento. Ya en viaje, el diputado sueco recibe una dieta de entre 23 y 75 dólares según el país visitado. Si almuerzan gratis por la invitación, ese monto es descontado. ¿Y el alojamiento?  «Cuando un diputado comparte la habitación de hotel con un familiar o amigo que no tiene derecho a tener los gastos pagados por el Parlamento, éste paga solo el 75% del valor del monto, y no son hoteles de lujo».

Para no aburrirle, apreciados lectores, dejemos de lado cuestiones más finas que esta escuela toma en cuenta desde el primer día de clase. Sinceramente creo que estamos aplazados y con serias dificultades de aprendizaje, luego de 30 años de recuperación del estado de derecho.

“La letra con sangre entra”, es la escena del cuadro pintado por Francisco Goya (1780/1785) en su crítica al sistema educativo de su época. La imagen muestra al maestro azotando a un alumno con las nalgas al aire y muy cerca, otros dos alumnos retoman sus tareas luego de recibir castigo semejante.

No quisiera entrar en comparaciones, pero a esta altura de los acontecimientos políticos que vive el país y a juzgar por los resultados, los desaforados y por desaforar, procesados e imputados sin condena, es tal la cantidad de merecidos traseros al aire, que creo que el maestro terminaría con el brazo acalambrado.

Arturo Enzo Bregaglio
Arturo Enzo Bregaglio
Abogado. Periodista y Lic. Ciencias de la Comunicación. Fundador y director de Radio Sur (Córdoba) y Radio Trinidad/ViVa (Asunción). Vicepresidente por América Latina y Caribe de AMARC (Asociación Mundial de Radios). Numerosos cursos de Comunicación Política y Derecho a la Comunicación en América Latina, Canadá y Europa. Consultor de la organización para la Migración Paraguaya. Gestión de las campañas en Estados Unidos, Brasil, España, Francia, Italia, Suiza y Argentina, para el logro del voto de los paraguayos en el exterior.

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