Al igual que la palabra o título de mamá, posee 4 letras y dos sílabas, lo que no los hace menos importantes que nada o nadie. Porque ambos géneros se complementan y juntos hacen ese difícil trabajo de atender, cuidar y educar a sus hijos desde que llegan al mundo hasta que dejemos de existir.
Los padres y hermanos son nuestros mejores amigos, realmente existen a nuestro lado no para molestar cómo a veces pensemos que sea. Cada 16 de junio en el mundo se recuerda el día del padre, una persona de suma importancia en toda familia porque es la persona encargada de brindar seguridad y confianza entre los miembros de cualquier familia. Él crea un ambiente de amor, seguridad y apoyo, fortaleciendo el vínculo padre -hijo/a.
El domingo muchas familias en el Paraguay se reunieron para homenajear a papá, que quizá no sea tan atractivo cómo la mamá porque hemos salido de su vientre y estamos casi siempre custodiados y preocupados por la señora que en realidad son ambos los que se inquietan por nuestra salud y vida al estar lejos de ellos o estar haciendo algo peligroso.
La angustia es similar en el hombre cómo la mujer, aunque creamos que el ser humano del género femenino es el único que tienda a preocuparse. Papá también se inquieta por cualquier cosa que nos pase donde y cuando sea. Es la persona que existe no solo para darnos la mesada que nos puede servir o no de acuerdo a cómo sea administrada o para darnos la mano para tener un empleo o cuando tengamos deudas que cubrir.
Imperativos que existen más debemos tener la madurez y capacidad suficiente para ser independientes y dejar de depender de los padres, jefes o quienes se ocupen de nuestro bienestar en la edad que nos toque vivir.
Grandes desafíos
La paternidad irresponsable también se caracteriza por las relaciones emocionales distantes, la falta de compromiso en el cuidado y crianza cotidianas de los hijos, y la práctica del control y la violencia en el hogar. Paraguay tiene un gran problema con este tema que trae profundas implicancias sociales.
Esto existe en Paraguay y el mundo desde hace rato, lo que no sirve para empezar, desarrollar o construir el primer equipo social que tiene un niño en su vida. Uno que lo debe ayudar a crecer seguro y confiando en sí mismo para tomar importantes decisiones en su vida en el futuro.
En Paraguay existen alrededor de 959.188 hombres que se convirtieron en padres, de los cuales 61,9% están en el área urbana y 38,1% en el área rural.
Donde sea en nuestro planeta el ser padre es un grado en la vida que no debe ser tomado cómo un título universitario o de cualquier estudio técnico realizado. Ser papá es una responsabilidad seria para cualquier hombre que haya tenido la oportunidad de haber sido comunicado que su pareja está embarazada.
Momentos que exigen mucho cuidado no solo por la mujer sino sobre todo por su entorno que debe tener sobre todo conciencia y atención para embarazadas y discapacitados porque en esos estados es difícil moverse o reaccionar rápidamente ante cualquier amenaza. Los padres deben asumir su condición con mauor responsabilidad porque su ausencia genera severos problemas.
Que existieron, existen y existirán siempre para mamá, papá, hermanos, tíos, primos y abuelos.
Y la responsabilidad de tener seguridad, estabilidad y lo que signifique para una familia tener la inmunidad suficiente ante cualquier riesgo no recae siempre sobre una persona. Que también posee sus responsabilidades, ocupaciones e intranquilidad que debe solucionar.
Abrazo a todo padre del país y el mundo que se hacen cargo de sus familias con responsabilidad, seriedad y comprometidos en la comodidad de su pareja, hijos y cualquier persona que dependa de su buen estado de salud y gestión cómo gerente, administrador o jefe de cualquier empresa.