Siguiendo la recomendación de la Corte Federal Suprema, el juez Marcelo Bretas ordenó que el mayor de los “doleiros”, Dario Messer, cumpla prisión domiciliaria, debido a la nueva pandemia de coronavirus. Sus abogados habían indicado que Messer es una persona de la tercera edad, ya que tiene 61 años, y entra en la población de riesgo de infección.
“Además, ingresó en el hospital entre el 18 y el 20 de marzo, lo que lo pone en peligro de contraer el Covid-19, y convertirse en un posible transmisor de la enfermedad, por lo que requiere su traslado inmediato a su residencia » escribe Bretas, en su decisión.
Para Bretas, «es, por lo tanto, una medida extra procesal, de carácter humanitario, que puede revisarse tan pronto como cesen las razones excepcionales y de emergencia». Messer había estado encarcelado en la Prisión Pública de Pedrolino Werling de Oliveira, conocida como Bangu 8, en el Complejo Gericinó, en la zona oeste de Río de Janeiro, desde julio de 2019.
El Ministerio Público lo acusa de ordenar un plan que involucra a otros cambistas que movió millonarias sumas de dinero en 52 países. Fue acusado de ser el responsable de los delitos de lavado de dinero, evasión de divisas y participación en una organización criminal.
NEXO CON CARTES
Cabe recordar que el “hermano del alma” de Horacio Cartes era Dario Messer, este último es investigado en Brasil por la Lava Jato, una operación que destapó enormes redes de corrupción tanto en el país como a nivel trasnacional, pero, según el juez Bretas, además de participar en la red corrupta, el expresidente paraguayo “ayudó” al cambista Darío Messer a huir de la Justicia y a ocultar un vasto patrimonio obtenido de forma ilegal.
En su denuncia, la Fiscalía consideró que la organización criminal estaba dividida en tres grupos -el financiero, el operacional y el político- y que practicaba delitos contra el sistema financiero, evasión de divisas, blanqueo de capitales y corrupción activa y pasiva, entre otros. La Fiscalía encuadró a Cartes en el núcleo político, el cual sería responsable por mantener las actividades de la organización y su impunidad gracias a su influencia en el Gobierno y en las esferas de poder.