Hoy es el día de la persona más trascendente en la historia de cualquier país: el maestro que enseña cuatro cosas centrales: 1. a conocer 2. a hacer 3. a ser y 4 a convivir. El maestro tiene cómo responsabilidad educar a sus alumnos que deben terminar sus clases con ganas de ser mejores que aquellos que enseñan cosas que probablemente no verán sus frutos.
El maestro dedica alma y vida para que sus alumnos tengan los conocimientos bien establecidos y les ayude a tomar las mejores decisiones en su vida. Cada 30 de abril se recuerda el día de según el MEC de 79.935 docentes matriculados 29.924 son hombres y 50.011 son mujeres. La mayoría de los maestros -no docentes como debería decirse- se concentran en zonas urbanas y en el sector oficial. Quizá educar no necesite de clases y formación ordinarias y hasta se podría decir que la mejor lección en ella sería la experiencia en la vida, sin embargo la pandemia nos ha demostrado la trascendencia del maestro en aula. Muchos abandonaron las clases por falta de maestros reales y esa es una muestra de su importancia.
AÑOS DE REZAGO
El filósofo español Fernando Savater quien escribió un maravilloso libro: “El Arte de educar” hace referencia al maestro diciendo que”·el mundo está lleno de genios pero pocos maestros, por otro lado dice que le hubiese gustado ser más bien educador que de maestro, también dice que es en las escuelas y cárceles donde se mide la estatura de la verdadera democracia de un país” Por ende es fundamental estudiar el estado de nuestras escuelas y prisiones para concluir en qué democracia vivimos y si estamos listos para ser democráticos, Nuestra la cultura cívica en Paraguay es muy corta y durante el gobierno de Stroessner los maestros ganaban un salario miserable pero se decía que su tarea era solo un apostolado. Savater afirma que: “ el maestro es el soporte básico del cultivo de la humanidad y su labor está ligada al sentido humanista de la civilización, porque él pone las bases de todo el desarrollo intelectual futuro”.
En Paraguay requerimos una mejor selección de maestros, salarios dignos y promoción de acuerdo a sus capacidades como en los países orientales. Este filósofo, ensayista y autor español que ha dedicado su tiempo y trabajo para pensar en la función del maestro, otras ideas también expuestas por este filósofo dice: “el maestro tiene a veces un papel socialmente humilde, pero fundamental desde el punto de vista de la civilización y de la humanidad”.
UNA VOCACIÓN AUTÉNTICA
Con la pandemia el educar ha sufrido una fuerte mutación por el hecho del cambio de clases presenciales por el nuevo método de clases virtuales que ha demandado otras capacidades a los maestros tradicionales. Estas formas deben incluir el uso de la tecnología han venido para quedarse por lo tanto debemos amigarnos con ella y mejorar su uso. Hay muchas cosas que mejorar en la trascendencia de los maestros y los salarios deben ser mejorados en función de resultados pero cuando se promete un incremento del 16% hay que cumplirlos. El Estado paraguayo tiene muchos recursos y los dilapida generosamente en detrimento de la educaciòn.
Debemos hacer que los que deseen ser maestros sientan un llamado auténtico por dedicar el tiempo a la gran misión de enseñar y reciban apoyo en recursos y de la sociedad toda en su conjunto. No debemos llenarnos la boca sino actuar en consecuencia que demuestre nuestra verdadera vocaciòn orientada hacia la enseñanza y el aprendizaje.